En ausencia I. Es todo un caso de estudio la falta de surte de esta comunidad. Mar del Plata no hace pie, amén de los episodios o situaciones que no le son propias. La pandemia no es propia, ni la cuarenterna (sic). Sí es propio haber elegido a Guillermo Tristán Montenegro como intendente, un hombre que, cuatro años antes, decía en campaña “San Isidro es mi lugar en el mundo”, y que quería ser el intendente de dicha localidad. Le dijeron nones, y se acordó de que era marplatense. Las miserias de la política lo dejaron colar por en medio, tal como reconoce hoy entre los altos mandos de Juntos por el Cambio. Así es que, entre criticas, se escucha decir “y, el gordo se metió por en medio”. Ese meterse por en medio llevó a este esquema que, para pagar el resultado, haya cargos por doquier. Su gestión suma ya alrededor de 200 cargos políticos, y apoyos cruzados que pesan sobre los marplatenses.
En ausencia II. Montenegro basó su campaña en decir que él había forjado la policía de la Ciudad de Buenos Aires, y nos apuraba diciendo que se instalaría en el COM. Decía que tenía equipo, y que él corregiría la maldita inseguridad. Hoy, es un fracaso a la vista que implica, entre otras cuestiones, no tener ni equipo, ni plan, ni objetivos. Con 45 operadores, el COM no puede advertir nada porque no hay posibilidad de coordinar nada serio. Correr formalmente a Dario Oroquieta del cargo pero dejándolo como “asesor”, implica un doble comando con el nuevo veraneante designado, Horacio Garcia (a) “Totó”, quien tiene menos Mar del Plata que La Mona Giménez. Es así: colaron Mar del Plata y ahora nos están dejando matar y robar escandalosamente en todos los barrios de la ciudad.
En ausencia III. Es tal el grado de abandono de tareas y responsabilidades, que habiendo recibido el área de Tránsito con una dotación de 20 alcoholímetros en diciembre de 2019, hoy todos están vencidos porque no se les han hecho las actualizaciones. La calle abandonada, los alcoholímetros vencidos, los vehículos sin mantenimiento, y los protegidos del gremio que pasan horas extras nunca trabajadas. Todo pago por el contribuyente. Mienten: anunciaron que habían desarticulado 61 fiestas clandestinas en un fin de semana. Imposible: hubieran necesitado desarticular una fiesta cada 40 minutos, considerando sábados y domingos. Tik Tok.
De partidas y enojos varios. Internamente, en el reducido grupo de veraneantes que están en la municipalidad, no hay onda con Santiago Bonifatti. Hubo una carga interna para removerlo, pero chocaron contra un planteo de hierro del intendente, quien dejó claro que el pequeñín está bancado por el numero dos del sindicato, Daniel Zacarías, y es, por ahora, una piedra en el zapato que se tienen que bancar. En donde todo arde, es en el área de medios. Florencia Pérez Lalli queda cada día mas expuesta. La sonsera de vender como viral el espectáculo de Tristán bailando en Tik Tok junto a una niña en el despacho principal de la comuna le bajó fuerte las acciones.