De poteros e intereses encontrados I. Una nueva ronda de diferencias insalvables entre los administradores políticos de turno y la industria pesquera surgió luego del encuentro denominado «Jornadas Pampa Azul». Un funcionario que está de paso en esta pésima gestión en pesquería, el secretario del área Malvinas, Antártida y Atlántico Sur, Guillermo Carmona lanzó declaraciones que valieron un comunicado conjunto de las organizaciones que involucran la pesca de calamar con poteros de bandera nacional: señaló que lo que ocurre con la pesquería fuera de la zona marítima exclusiva —es decir, la milla 200— se debe al bajo volumen de la flota potera. Según sus palabras, hay que dar más permisos de pesca, y sanseacabó la cuestión.
De poteros e intereses encontrados II. Obvio que todos los ofendidos, si vieran la oportunidad de beneficiarse —al igual que Groucho Marx— pasarían de inmediato a abrazar otros criterios. Ya pasó con los congeladores: los armadores que más ruido metieron en los ‘90s con el sonsonete de que «los congeladores contaminan», todos sin excepción, son ahora dueños de estos tipos de barcos. Lo que no hay, es una política de Estado al respecto. Argentina tiene que impulsar un estricto cumplimiento de los acuerdos del Mercosur y presionar a Uruguay para que deje de servir como puerto franco de la pesquería china, que se abastece en dicho país, así como tratar a fondo con España el rol de la flota gallega que pesca en Malvinas. Todo lo demás, es cortina de humo.
Zanchetta, «Conu» Rodríguez y la terminal Casalongue I. Eventos recientes han permitido detectar —pero no terminar con— la organización ilegal de espionaje que lidera el alto cargo de La Cámpora Fabián Rodríguez y en la que está implicado el diputado nacional Rodolfo Tahilade, quien a su vez tenía cuando menos dos terminales «periodísticas»: una de ellas, la Agencia Nova, propiedad de Mario Casalongue. Tal como cita en su extenso interlocutorio el fiscal actuante, el material producto de las trapacerías de la orga integrada por el ex oficial Ariel Zanchetta, el diputado nacional Rodolfo Tahilade y el subdirector de la AFIP Fabián Rodríguez era reproducida en dos medios digitales: Realpolitik y Nova. Precisamente en esta última se publicaron imágenes íntimas de Fernanda Montoto Raverta.
Zanchetta, «Conu» Rodríguez y la terminal Casalongue I. El episodio de la publicación —de obvio pésimo gusto— fue atribuido a una reacción de enojo por la ruptura de una relación íntima. Hoy, la lectura es bien otra, ya que este grupo espiaba a propios y ajenos, incluido —por caso— Wado De Pedro. Nova tiene una terminal en nuestra ciudad y hay un gremialista —que en su momento presentó a Montoto Raverta como «la futura intendenta de Mar del Plata»— que probadamente tiene llegada para hacer el tipo de canalladas que hace este medio.
Zanchetta, «Conu» Rodríguez y la terminal Casalongue III. Esa operación contra Montoto Raverta fue una clásica operación de phishing, léase: ingresaron al móvil, capturaron toda la información, y luego la enviaron a Nova para su publicación. Mario Casalongue fue en su momento derribado de una trompada y pateado por Francisco de Narváez quien, no conforme, lo pateó en el piso hasta que lo pudieron alejar del cuerpo del director de Nova. Recientemente, Casalongue —quien tiene una terminal en Mar del Plata— fue condenado a 25 días de prisión en suspenso y una probationpor haber acosado y discriminado con sus notas a la pareja del presidente Alberto Fernández, Fabiola Yáñez, y a su hijo, Estanislao Fernández, y luego haber desobedecido la orden judicial de detener esos ataques y levantar de Internet las notas ofensivas. Establecer el nexo entre estos operadores —hasta ayer en las sombras— es un tema que recién inicia. (Continuará)