Malas lenguas 1454

Horas complejas I. El cierre de las listas para esta elección extraña en la provincia de Buenos Aires es un caos. No sólo por lo que pasó en La Plata, con esos extraños cortes de energía que prorrogaron el cierre de listas, algo que nunca jamás se había visto; sino por lo que llegó después, que es aún más complejo: primero, se cayó la lista local de Somos BA y luego, en un juego político de pinzas, también se cayó —aunque los interesados lo niegan— la lista de los accionistas marplatenses.

Horas complejas II. Es así que algo ha quedado claro: quien tiene la palabra final en el PJ local, sea cual sea el esquema de poder del que se quiera hablar, es Fernanda Montoto Raverta. Ninguno de los aliados o satélites que rodean a esta opción política puede pasar ni obtener algo sin su acuerdo. Eso le quedó claro el ex intendente de Mar Chiquita, Jorge Paredi, luego de una charla extensa. La conclusión de «Pitingo» luego del encuentro fue «qué piba dura, por favor».

De inversiones y cambios. Los que se están produciendo en la ciudad, en un contexto económico a la baja que no arredra a quienes buscan invertir: la cadena Cetrogar abrirá un nuevo local en la ex Casa Tía ubicada en Av. Luro entre Av. Independencia y Salta, y busca otras dos locaciones más, una en el sur de la ciudad y otra en la zona de Constitución. Los que han desembarcado en el país y también eligen Mar del Plata, son los uruguayos de la cadena Indian, enfocada en la moda joven y en ofrecer precios accesibles. Ellos eligieron ubicarse en la peatonal, en donde se advierte que pueden convertirse en una fuerza de cambio para ese deteriorado paseo del centro de la ciudad.

Tole tole judicial. El que ha desatado una invervención fuera de las normas del derecho laboral y el articulado correspondiente en perjuicio del abogado Christopher Adrew Lauro, quien se disconforma ante la Corte por la actuación de las juezas de trabajo Eleonora Slavin y Erika Graciela Salette. ¿El motivo? Actuaron desarrollando sentencia en subrogancia del tribunal 4 sin estar formal y legalmente habilitadas para ello. Ambas se basan en una tablita de reemplazos, un esquema muy casero que obvia la publicación en el boletín oficial de las subrogancias y de otras determinaciones judiciales. Mucho ruido.

De judiciales y tribunales de trabajo. La que da para la comidilla a diario, es la magistrada Cecila Bartoli, amante de la cumbia a todo lo que da en su tribunal. Hay un tema fuerte, y es la condición psiquiátrica de la jueza: Bartoli fue llevada por la fuerza a una institución de salud mental tras una denuncia de una hija suya. Tan tremendo fue, que se la llevaron con chaleco de fuera. Lo raro, es que volvió al cargo como si nada. Hay una cadena de protección que llega hasta la Corte y que le está haciendo demasiado daño a la sociedad.