Tribunalicias I. Increíble, pero real. La fiscal Alejandra Bonichini ordenó detener y llevar ante su presencia al conductor de un VW Bora con orden de secuestro por ejecución prendaria. La detención ordenada por Bonichini fue bajo la figura de encubrimiento, figura que se aplica a quienes son sorprendidos in fraganti circulando en vehículos robados. Bonichini abrió IPP bajo el número 20.567-15, cuando lo que correspondía era retener el vehículo para ponerlo a disposición del juzgado reclamante. La detención ordenada por Bonichini quedó sin efecto, al advertirse la burrada cometida, y el conductor fue liberado sin disculpas y sin respuesta alguna de cómo seguir su camino ante la violación de sus derechos por parte del retén de Gendarmería que habitualmente hace controles en la ruta 226 camino a Balcarce.
Tribunalicias II. Si bien las publicaciones de la última semana citan a los camaristas Monterisi y Loustaunau como autores de la revocatoria de la sentencia en primera instancia del juez Raúl Garros, una atenta lectura del documento lleva a advertir que el enjundioso trabajo intelectual se debe indudablemente a la pluma de Ricardo Monterisi; Loustaunau meramente acompañó con su firma, el clásico “adhiero” (poco mérito para lucir en los medios como autor o coautor de tamaña decisión jurídica). Garros, juez de la sentencia cuestionada por ser una copia no circunstanciada en setenta y cinco páginas, asevera en su defensa que no se copió, luciendo pinta turista desde el Brooklyn Bridge en NYC.
De cerco y amistades. Para el dueño del multimedios, Aldrey, la intrusión amenazante en el estudio del abogado Andrés Barbieri, puesta en la atención pública por este medio, no ameritó cobertura alguna. Curioso, luego de la cobertura que canales de televisión y radios de la ciudad le dispensaron al tema la semana pasada, toda vez que la acción se llevó a cabo contra quien procura la investigación que expone la corrupción en materia de construcción de viviendas y asfaltado en Mar del Plata. Se entiende el silencio, claro: para el galaico emprendedor, esta cobertura implicaría poner en escena a los hermanos Trujillo, capos de la UOCRA local, justo en la semana en que UOCRA llevaba adelante su congreso nacional y utilizaba los salones del Hotel Provincial. La mafia lugareña se cuida las espaldas.
Satisfacción. La que provoca que la interacción de este medio haya contribuido a que el vecino Oscar Polansky finalmente haya sido operado en el HIGA, y que la niña Sabrina L C finalmente haya podido reencontrarse con su madre luego de poner en la conciencia pública la inacción del juzgado de familia 2 de la ciudad. Actuar en favor de la sociedad es el motivo excluyente que da razón de ser a un medio de comunicación.