En palabras del gobernador Axel Kicillof, la temporada de verano “está espectacular”. Se apalancó en los dichos del productor teatral Carlos Rottemberg, quien habla de un crecimiento de la taquilla en un 17% con respecto a iguales días de la temporada 2019. Para Kicillof, “la gente está mejor porque tiene un manguito más en el bolsillo”.
Todo esto fue dicho en la cara del intendente Guillermo Montenegro, quien, con rostro contrito, asistió al acto en el Museo Mar, donde no le quedó otra que tragarse el sapo de tremenda parrafada vacía de toda verdad. Para malestar del votante de Juntos por el Cambio, agradeció con enjundia la preocupación de la provincia por apoyar a Mar del Plata a través del programa RECREO.
Ver las manifestaciones en los medios y en las redes deja en claro que ese escenario falso, brotado de un discurso alienado en el que se supone que hay que agradecer a “Alberto y Cristina” por lo mejor que esta la sociedad, se le atraganta al votante no kirchnerista.
Es la primera temporada que no habrá fiesta ni cantina de los pescadores. La primera temporada sin fútbol de verano desde 1968. Al igual que en 1974 —gobierno de Juan Domingo Perón— y en 1976 —gobierno de Isabel Martínez viuda de Perón—, el torneo de verano no se realizará.
Según reveló el presidente de la Liga Marplatense de Fútbol, hubo reuniones con Torneos & Competencias en las que participó Guillermo Montenegro, pero nada se pudo resolver. El traspié para la administración es muy fuerte. Como bien debe saberlo el concejal de AM, y presidente del Club 11 Unidos, Horacio Taccone, en este 2020 los clubs de la ciudad tendrán que hacer un aporte extra para pagar, entre otros emolumentos, su cuota de afiliación a la propia liga.
El torneo de verano, un puntal del éxito de la temporada alta, traía fondos a las arcas de la liga y permitía solventar gastos que, ahora, deberán salir de la cuota societaria. Quizá el manguito más que la gente tiene en el bolsillo permita alegremente que ese dinero, que ya no ingresará, pueda ser pagado por el socio de cada club. Cuando menos, desde la verborragia discursiva del gobernador, puede leerse así.
Así como Rodríguez Larreta queda muy expuesto ante su votante por su actitud ultra conciliadora con el gobierno nacional en el debate de la coparticipación, que Montenegro no diga nada públicamente sobre este y otros temas que afectan a Mar del Plata, tiene impacto muy negativo en el ciudadano.
Un caso clave es el del aumento de las tasas que se cobrarán de ahora en más, que hacen perder competitividad a nuestro puerto, beneficiando a los de Santa Fe y la Patagonia. La actividad de la pesca ya encara fuertemente golpeada por la crisis este nuevo cuadro impositivo que preanuncia cancelaciones de contratos de forma casi inminente.
El peronismo, que en nada cede, salió con los tapones de punta a cuestionar el presupuesto 2020 propuesto para el municipio de General Pueyrredón. Virginia Sivori señaló: “Nuestros vecinos y vecinas han sufrido enormemente las políticas económicas de Cambiemos. Por eso, desde el Frente de Todos haremos todo lo necesario para que no sean siempre los contribuyentes los que tengan que hacer el esfuerzo”.
Más cínico, no se consigue.