Un allanamiento lleno de claroscuros

Las acciones judiciales bajo la égida de Santiago Inchausti suelen estar fuertemente acompañadas por el Ladrey News actuando como la nave insignia del cerco informativo. Esta vez, fue diferente.

Lejos de la época en la que el gárrulo galaico y sus jefes de redacción decidían qué, cuándo y de qué manera se decía y conocía lo que ocurría en la ciudad, la realidad actual hace que la comunicación fluya por distintos caminos y que —días más, días menos— lo que realmente ocurre eventualmente llegue a la luz.

Un hecho local, pero conectado al poder provincial, le estalló en las manos al juez encarcelador serial cuando, siguiendo la pista de unos teléfonos robados, se choca con una gigantesca operación de latrocinio a la res pública que conecta Berazategui, Mar del Plata y La Plata.

Si bien la comunicación local puso el tema como una continuidad del intendente contra el delito, los hechos apuntan hacia una red espuria de apropiación de mercadería originada en el Estado para su venta o utilización política en años de elecciones.

La comisión perteneciente a la Policía Federal ingresó al domicilio de Mario Bravo 9710 donde funcionaba (¿?) una cooperativa denominada «La Popular», en donde se hallaron 1.100 kg de alimentos no perecederos por un valor estimado de $3.500 millones.

El concejal radical Daniel Núñez presentó un pedido de informes al Ministerio de Desarrollo de la provincia, cuyo ministro es Andres «el cuervo» Larroque. Según señaló Núñez en la FM 99.9: «Básicamente lo que sucede acá es que hay falta de control por parte de quien tiene que realizarlo que es el Ministerio de Desarrollo de la comunidad. Sospecho, no tengo pruebas, que esta falta de control es profesa, porque más que dar alimento para ayudar a gente que lo necesita, tiene que ver con acciones políticas que nos tienen acostumbrados quienes gobiernan hoy la provincia y lo hicieron en el país. No hay que buscar demasiadas explicaciones a este tipo de cosas. Habitualmente cooperativas, organizaciones sociales, se financian con este tipo de mercadería. La mercadería si no se está encima, no llega a la gente».

Ni los accionistas marplatenses, ni los unidos patrióticamente han dicho «esta boca es mía». Extrañamente, se suman al silencio los ediles hoy libertarios María Cecilia Martínez y Luis Emiliano Recalt. Curioso.

Desde ese local se actuó, en la campaña pasada, bajo las banderas de Fernanda Montoto Raverta. Hay quienes señalan que es gente de Libres del Sud. Como sea, el hecho cierto es que quedó a la vista una operación política para hacer caja o comprar voluntades con dinero de la sociedad. Y los que deben abrir la información, la cierran. Una vez más, vamos a romper el cerco informativo.