1) Manuel Mosca
(andá a hacer bullying a Bolívar)
De él dicen: “es muy joven, por eso se va de boca”. Y bueno, si te dan el cargo y la responsabilidad, hacelo bien. Si te creés Messi, tratá de embocar los penales —ah, cierto que Messi los erra. Bue—. Un manto de piedad para el stalker de Bolívar al que nadie de la política aún le ha echado flit.
2) Hernán Mourelle
(esa boquita)
“Tambor” es un caso: mete primera a fondo y ni la mirada de su principal cuestionadora lo amilana. En la comisión de Hacienda, ante la mirada furiosa de la curul Coria, les tiró con munición gruesa a los ruralistas que buscan evitar un aumento del 400% en la tasa de caminos viales. Sin eufemismos, los trató de caraduras.
3) Carlos Vázquez
(esa costumbre de vivir del Estado)
Muchacho complejo que se apasiona por vivir de la teta del Estado. Se le viene una muy difícil, porque el corte de recursos a las asociaciones de bomberos voluntarios pondrá en entredicho su capacidad de gestionar. ¿Y si le pide ayuda a su vecino, el aldeano de Lugo?
4) Florencio Aldrey Iglesias
(cerrado por reformas)
Es obvio que viene para atrás. No es la edad sino la realidad. Le bajaron los carteles —ergo, su cetro y su corona—, le clausuran los locales que no están habilitados en el shopping Paseo Estación Terminal Sur, y, sin plata del Estado, no puede mantener abierto el Hermitage. Es que no hay mal que dure 100 años, ni tampoco bien o privilegio.
5) Angélica González
(en cuotitas)
La doña que ocupa la banca de curul en nombre de los sagrados principios republicanos de Lilita tira un centro; que las tasas comunales se paguen mes a mes. Si le dan bola, habrá que ver qué dice el secretario “Tambor” Mourelle, que no es muy amigo de que le marquen la cancha.
6) Miguel Gugliemotti
(no cree nada)
El secretario general de la Bancaria dice que en su opinión, lo de la caída de la desocupación en Mar del Plata no es real. Estaría bueno que la CGT convoque a técnicos y presente un trabajo propio, porque para creencias ya están los curas, pastores, rabinos y chamanes de todo tipo.
7) Facundo Moyano
(lejos de Alvarado)
El hijo cool del patotero mafioso de Hugo se ha gastado una fortuna pagando mujeres para hacer imagen. Claro que no ha sido muy buena su performance, por cierto: reciente encuesta lo ubica en muy mala posición en cuanto a consideración pública. Ni Alvarado le dio aire a sus ambiciones.
8) Christian Curzio
(molesto con Mariú)
Referente del Foro de Seguridad Municipal, estalló denunciando la nada misma de los cambios en seguridad en Mar del Plata. Otro que se dio cuenta de que cambió el color: ya nada es naranja, aunque en el fondo, todo sigue tristemente igual.
9) Gustavo Sánchez Ibáñez
(un tantillo hipócrita)
Pope del SUTEBA bastante calladito en estos tiempos de intervención al Consejo Escolar, se queja de que Mariú se esconde detrás de un cerco de protección policial. Como si no supiera que sin protección se le caería encima la turbamulta que acosa a funcionarios políticos a diario en actos y encuentros sociales.
10) Marcelo Pasetti
(loser en caída libre)
Ay, loser, loser… lloriqueando por los pasillos, exponiendo su falta de sentido común e incapacidad de análisis político. Tomate unos días en la ciudad de las diagonales, y que el Turquito Mohadeb te haga mimitos y te mienta susurrándote al oído que vos manejás la opinión pública de Mar del Plata. Dale, andá.