1) Adriana Donzelli
(el dedito en alto)
La lideresa del SADOP alzó el dedito acusador y destrató a los padres que se movilizan por la vuelta de las clases presenciales. La doña no quiere padres activos por sus derechos constitucionales y cívicos, los prefiere callados y acatando. Se equivocó de era.
2) Vito Amalfitano
(en nombre de…)
El escriba de Florencio —el vacunado VIP— admirador del exégeta de la mentira, del relator de las fantasías kukas, dice estar preocupado en nombre del pueblo. Triste llegar a una banca para sólo hacer relato y sin aportar nada concreto para la sociedad.
3) Federico Fagioli
(¿desestabilizador?)
Compañero de ruta de Grabois. Lo grabaron en Colombia participando de una rosca para hacer caer al gobierno de Ivan Duque. No se disculpó, sí se enojó porque sus palabras trascendieron públicamente. Kuka de libro.
4) Ludwig Eisenbok
(una mano tendida)
Ciudadano alemán fanático de Argentina. Donó $400.000 al policía Chocobar y le agradeció públicamente su vocación y deber de servicio. ¿Lo tienen que hacer notar extranjeros, que Chocobar cumplió con su deber?
5) Verónica Razzini
(cambiar para que algo cambie)
Lidera la una asociación empresaria contra los bloqueos. A los Moyano se le plantan las mujeres. Es un cambio de era y de signo. Empoderada real, no de ficción mediática. Ejemplo que vale seguir.
6) Alejo Ramos Padilla
(algo más que desprolijo)
Juez híper cristinista. Se zarpó feo con tal de llevarse puesto al periodista Daniel Santoro. Se le viene una brava… muy brava (ver Nota Central de esta edición).
7) Vilma Baragiola
(ascenso y pedido de explicaciones)
Vice presidenta del comité local, quiere que alguien se haga cargo del estropicio que implica tirar elementos descartables de medicina y cajas vacías de la vacuna Sputnik en baldíos de la ciudad. Su pedido de explicaciones destapa el desorden del sistema vacunatorio de La Cámpora en la ciudad.
8) Miguel Gugliemotti
(haciendo los deberes)
El bancario corre apurado a un cargo electivo. Si todo depende de Fernanda Montoto Raverta, vaya a saber si lo logra. Un cuarto lugar en la lista, como viene la mano, puede quedar muy lejos de la banca.
9) Marcos Gutiérrez
(alma de “vigi”)
Habría sido un gran candidato para la NKVD, o la Stasi. Aquel que imaginaba “represiones de Arroyo”, ahora denuncia y vigila a los vecinos de la ciudad. Tremendo guardia de fronteras se perdió el muro de Berlín.
10) Marianela Romero
(fuerte denuncia)
Si es como lo pregunta la edil Romero, hay que preocuparse. Un millón de vacunas que nadie dice en dónde están. Según datos cruzados, hay un agujero de un millón de vacunas entre las que recibió la provincia, y las que aplicó. Interrogante en clave electoral: ¿para qué las esconden?