1) Carlos Balmaceda
(¿política criminal?)
Muy fuerte el libelo que los grupos de actores lanzaron sobre el secretario de Cultura de la comuna. Lo tildan de llevar adelante una política criminal, nada menos. Eso sí: están mucho más quietos que cuando buscaban acorralar el gobierno de Fernando Arroyo. Comparar al literato con Silvana Rojas, es algo cruel.
2) Jorge Bergoglio
(haz lo que te digo, no lo que hago)
Lanzo el diktat “la propiedad privada es un derecho de segundo orden”. Curioso viniendo del jefe máximo de una organización que, de la propiedad privada, ha hecho un culto en sí mismo. El celibato no es otra cosa que la necesidad de poner orden en la propiedad eclesial: cura célibe no engendra, y sin descendencia no hay discusión hereditaria.
3) Marcelo Cardozo
(firme hoja de ruta)
Salió a hacer cumplir la ley: clausuró el Ogham de Alem, le cortó la impunidad a la CTEP y a otros grupos que venden sin control de ningún tipo alguno frutas y verduras en la vía pública, y lleva la presión sobre las fiestas clandestinas a fondo. Buscaba su lugar hace tiempo, parece que lo encontró.
4) Alfredo Lazaretti
(camino a la insignificancia)
En un concurso de quién es quién, saldría último. Ha logrado la inexistencia social, política y cultural de la Universidad Nacional de Mar del Plata. A tal punto, que el kukismo liderado por Fernanda Montoto Raverta cabildea un plan para ganar la conducción del segundo presupuesto público de la ciudad.
5) Pablo Zapata
(casinos en estado alarmante)
Lidera un grupo interno de casineros lejos de las conducciones formales. Anuncia desgracias si no hay inversión en los casinos de Mar del Plata y Monte Hermoso. Para que algo crucial pase, los lugares de juego primero, deberían abrir. Casinos cerrados y boquitas calladas (las de los dirigentes gremiales). Todo muy extraño.
6) Mónica Lence
(no calla, no se rinde, da batalla)
Docente de escuelas especiales, se convirtió en la voz de Padres Organizados. Una presencia potente que hay que escuchar. El daño a la educación y a los niños, es ya un acto de violencia institucional que no se puede admitir.
7) Hugo Casarsa
(negacionista)
En torno al director del Materno Infantil hay mucho ruido. Tanto, que no sólo se habla de mal trato al personal, sino que trepa hasta el desmontaje del área de quemados. Lo más loco es que don Hugo niega que alguna vez haya existido. Kukas. Un espanto.
8) Santiago Martín
(a contrario sensu)
Juez federal del mismo rango que su colega López. Dio por tierra con la medida que impedía hacer abortos en medios públicos y le abrió la puerta a organizaciones internacionales en la presentación. Extraño y singular.
9) Sebastián Puglisi
(¿y si abrimos las escuelas?)
El ex secretario de Educación de Carlos Fernando Arroyo clama por los dramas de los niños sin clases. Interrogante, ¿si la tiene tan clara, por qué no abre las escuelas municipales y se pone del lado de la sociedad? Respuesta: muy disruptivo para alguien tan estructurado y conservador.
10) Ariel Tarico
(simplemente genial)
Un imitador que rompe el marco de ese rubro artístico. Sus personajes increíbles en clave de humor hablan de política en alta sintonía y nivel. Chapeau por él.