1) Gustavo Arnaldo Pulti
(Se cree Highlander)
Agrandado como galleta en el agua. Tanto alimentarse a sopa boba de la cadena de corte y pegue, termina creyéndose sus propias fábulas. Decir “moriré tranquilo cuando mejore la vida de la gente de los barrios” es un pelín grandilocuente. Megalómano, podría decirse.
2) Leonardo Celsi
(No se hace cargo)
Una vergüenza. Huye de sus responsabilidades, se oculta ante la sociedad y contempla descaradamente cómo le cargan a un colega suyo la cuenta de su falta de compromiso con la tarea.
3) Maximiliano Orsini
(De tanta rosca, termina enroscado)
Abogado especializado en asistir a familias que han sufrido por siniestros de tránsito. Se pasa de rosca, y la cadena de corte y pegue le hace el aguante. Mal, muy mal.
4) Pablo Farías
(Jugando al candidato)
Pablito, como le dicen los amigos, quería un segundo mandato como diputado provincial. Está bueno, porque ya se sabe que la Legislatura te cambia la vida. A los políticos, claro, no a la gente. Recibió premio consuelo: es candidato a intendente. Un viaje a Disney hubiera sido lo mismo en fantasía, e incluso hasta más barato.
5) Javier Faroni
(Se fue en amagues)
Mucho cartel, mucha historieta en los cafés de lo bien que medía para intendente. Pero resulta ser que desde Güemes y Alvarado solamente, no se puede hacer una candidatura con algún buen pronóstico. Hay que timbrear un poquito más lejos, aunque sea pasar Juan B. Justo…
6) Alejandro Balsano
(El “Pichu” maneja la rosca)
El “Pichu” Balsano decidió jugar la baraja de formar lista en Mar del Plata para “el Adolfo” de San Luis. Y, hay tanta gente en el baile, que uno más, por ahí, no molesta. Habrá que ver si alguien le presta atención…
7) Roberto Maturana
(No afloja por nada)
El tipo denuncia y denuncia, aunque por ahora hacen como que no lo escuchan. Es tan persistente, que algún día, a algún integrante de la mafia en el Puerto se va a llevar puesto.
8) Laura Mazzaferri
(Muy ocupada)
Fiscal de Justicia Legítima, integrante del círculo del poder federal actual. Cumplidora, sólo atiende aquello que al Estado le interesa estigmatizar. Ya cuenta en su haber con preciosa denuncia por inacción judicial. Por algo se empieza.
9) Rosanna Morrone
(En boca cerrada)
Finalmente, la martillera Morrone asumió en reemplazo del concejal Maximiliano Abad, de licencia. Aclaró: “No voy a hablar”. En boca cerrada, no entran ni moscas ni salen incordios políticos.
10) Antonio Gilardi
(Hay que mantener la maquinaria andando…)
Secretario general de los municipales, quiere seguir sumando años y realización económica de la mano de su cargo. Se sabe: pertenecer tiene sus privilegios.