Ante la polémica por el aumento de la TSU que se afirma que ha sido desproporcional en algunos casos, el director de la Agencia de Recaudación Municipal dio los detalles en la 99.9 y señaló que “en muchos casos tenían diferencias de metros declarados en ARBA y en la ARM y tenían una valuación irreal. Eso genera un salto que parece exorbitante”.
Muchos son los reclamos que se vuelcan en los medios de la ciudad acerca del aumento de la Tasa de Servicios Urbanos (TSU) en la ciudad y las explicaciones están disponibles. Las brindó en la 99.9 el director de la Agencia de Recaudación Municipal (ARM), Mariano Correa.
En principio, se refirió a los rumores de que el Concejo Deliberante buscaría que se presente en el recinto a dar explicaciones, un mecanismo que han utilizado también con otros funcionarios: “me enteré por trascendidos periodísticos que la Comisión de Hacienda me estaría convocando al Concejo Deliberante, pero oficialmente no recibí nada. Lo que ha sucedido es que comenzamos con un inconveniente principal que fue la aprobación de la ordenanza un año después del envío de la misma al Concejo. Eso genera una cantidad de problemas operativos que la gente y los concejales no conocen”.
Siempre se trabaja a destiempo, pero han tratado de que los aumentos propuestos tuvieran un menor impacto para el bolsillo de los vecinos: “este año, la ordenanza prevé que tomemos la valuación fiscal de ARBA del año pasado. Siempre venimos un año atrás y en promedio, han crecido un 800% en Mar del Plata. Esto hizo que tengamos que adaptar la tasa a esa realidad. Bajamos la alícuotas, subimos los topes de categorías 8 veces para que el impacto sea lo más inocuo posible”.
En los reclamos presentados, por ejemplo, por la Defensoría del Pueblo los casos son puntuales y fueron analizados. La consecuencia es que, en realidad, el aumento se da por una irregularidad en la presentación de papeles del propio vecino: “los problemas que hemos visto es de información de los propios contribuyentes que, por ejemplo, tenían diferencias de metros declarados en ARBA y en la ARM y tenían una valuación irreal. Eso genera un salto que parece exorbitante, pero lo que pasa que venía pagando mal y ahora el ajuste le parece mayor”.
A pesar de esa explicación, remarcó que el nivel de reclamos en la ciudad es muy bajo sobre la cantidad de contribuyentes: “en Mar del Plata hay 430.000 cuentas y los reclamos están por debajo del 5%. No hay errores por haber enviado tasas de más a los vecinos, al contrario cuidamos una por una las cuentas para no tener ese tipo de reclamos”, finalizó.