Cartas parroquiales I. Las cuestiones que afectan a la grey católica —en particular, los cambios en la cuestión de la designación de un obispo para nuestra diócesis— tienen una lectura pública, y varias en off. Señalan a este medio: «Se nombra a Monseñor Gustavo Manuel Larrazábal. Este hombre fue denunciado por una mujer, marplatense, que tiene aparentemente relación con la orden de las Carmelitas Descalzas, de 56 años, quien lo denunció por determinados hechos que ocurrieron en Buenos Aires entre 2007 y 2013, tras lo cual el religioso fue trasladado a Mendoza, provincia en la que nació el 31 de enero de 1961 en la ciudad de San José, departamento de Guaymallen». La historia trascendió en el diario de Ladrey Iglesias y ahí es donde comenzó el desbarajuste que tiene hoy a Mar del Plata sin obispo.
Cartas parroquiales II. La fuente de esta publicación —con mucho detalle—fue atribuida a Luis Alboniga, de quien se sostiene que es un hombre muy pio, por lo que es muy querido y respetado. El enfrentamiento por la designación de Larrazábal que surge de la denuncia, llevó a reuniones en el obispado local y a una comunicación con la nunciatura, la cual respondió con un comunicado sin firma avalando al denunciado. De ahí, a la retaliación a Alboniga, hubo muy poco tiempo.
Cartas parroquiales III. Alboniga fue traslado de la diócesis de Mar del Plata, nadie sabe bien a dónde. El tema ha provocado tanto estrépito que lleva al propio Ladrey a abjurar de Bergoglio, afirmando que no reza más por el papa. Quizá eso juegue a favor de Bergoglio. Lo cierto es que hay aquí una lección gravísima, y es que, quien va por el bien en la iglesia católica, puede terminar crucificado.
Libres. Luego de seis años —sí, seis años— los denunciados, encartados, y encarcelados integrantes del estudio jurídico integral Roberto Balbuena, Luis Miguel Irós y Rubén David Cagni han recuperado su libertad. Increíble: en seis años, la fiscalía actuante no ha logrado reunir prueba que determine la razón de las imputaciones y el juicio se precipita aun gran fiasco. Fiasco gravoso, por cierto, para el fisco y para el erario público. Los juicios de resarcimiento van a ser millonarios.
Enojos y cambios. Los enojos producto de la caída del tratamiento de la ley especial que propuso el presidente Milei están llevando a un nuevo escenario político. De eso se habló en la reunión que mantuvieron integrantes del PRO en Mar del Plata que concurrieron con la excusa de los fastos Ladrey por los 150 años de la ciudad: Diego Santilli y Hernán Lombardi, entre otros, compartieron almuerzo con Alejandro Rabinovich y Agustín Neme, conversando sobre estos tópicos que preanuncian un acuerdo con los libertarios. En las conversaciones salió varias veces el nombre de Nicolás Posse, quien sería el principal obstáculo para llegar a un acuerdo.