El dispositivo experimental brinda un control continuo y tiene el tamaño de una estampilla postal. Los investigadores de la Universidad de California ya lo probaron en 100 pacientes con buenos resultados.
Un parche portátil del tamaño de un sello postal que puede monitorear la presión arterial de forma continua podría ayudar pronto a las personas a gestionar su hipertensión.
Investigadores de la Universidad de California, en San Diego, que desarrollaron el parche de ultrasonido portátil, informaron en la edición del 20 de noviembre de la revista Nature Biomedical Engineering que ha funcionado bien en pruebas con más de 100 pacientes.
Mantener una presión arterial normal (120/80 mm Hg) ayuda a prevenir muchas enfermedades, desde enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares hasta problemas renales, demencia y pérdida de la visión, por lo que muchos pacientes con presión arterial alta usan un dispositivo de brazalete y medidor para rastrear sus niveles.
“Las mediciones tradicionales de la presión arterial con un manguito, que se limitan a proporcionar valores de presión arterial de una sola vez, pueden por altos patrones críticos”, señaló el coautor del estudio, Sai Zhou, que recientemente recibió su doctorado de la Facultad de Ingeniería Jacobs de la Universidad de California, en San Diego.
“Nuestro parche portátil ofrece un flujo continuo de datos de la forma de onda de la presión arterial”, lo que le permite revelar tendencias detalladas en las fluctuaciones de la presión arterial”, agregó en un comunicado de prensa de la universidad.
El parche suave y elástico se adhiere a la piel y se usa en el antebrazo. Un conjunto de pequeños transductores en su interior envía y recibe ondas de ultrasonido que rastrean los cambios en el diámetro de los vasos sanguíneos.
Los desarrolladores dijeron que el parche produce resultados comparables no solo a los de un manguito de presión arterial estándar, sino también a los de un dispositivo altamente preciso, pero invasivo que se inserta en una arteria en unidades de cuidados intensivos y quirófanos para monitorear continuamente la presión.
En las pruebas que involucraron a cuatro pacientes que estaban en cuidados intensivos después de la cirugía y 21 que se sometieron a cateterismo cardíaco, las mediciones del parche fueron similares a las de la línea arterial. Eso, dijeron los investigadores, muestra su potencial como una alternativa no invasiva.