El fin de las gangas chinas: Bruselas acorrala a Shein, Temu y AliExpress

El 1 de enero entra en vigor la eliminación de la exención para pedidos de menos de 150 euros, lo que encarecerá las compras en plataformas asiáticas y reconfigurará el mapa del comercio online en España.

La patronal de la gran distribución Anged –que agrupa a empresas como El Corte Inglés, Ikea o Carrefour, entre otras– advirtió recientemente en un informe que el auge de plataformas como Temu, Shein o AliExpress está cambiando las reglas del juego en nuestro país. España, con más de 400 millones de paquetes de menos de 150 euros –los llamados de minimis– procedentes de China, se ha convertido en el epicentro de la batalla regulatoria que mantiene Bruselas contra estas empresas. La discusión ya no es si habrá cambios, sino a qué velocidad llegarán y cómo afectarán al bolsillo del consumidor.

Hasta ahora, una laguna en el tratamiento fiscal permitía la exención del pago de aranceles a los paquetes de menos de 150 euros (de minimis) que entraban en Europa. Esto ha provocado la entrada masiva de productos procedentes de China a unos costes considerablemente más bajos que los que afrontan las empresas europeas sujetas a importación estándar. Si bien a España solo llega alrededor del 8,7 % del total de estos envíos –unos 4.600 millones de paquetes anuales de bajo valor en el conjunto de la UE–, es el país con mayor penetración de plataformas chinas en Europa.

En torno al 56 % de las compras online de los españoles son importaciones desde otros países, según la CNMC, mientras que Landmark Global sitúa a China como principal origen de los envíos internacionales a España, con el 59 % del total. Según el informe de Anged, aproximadamente un tercio de todas las compras online realizadas en España proceden del gigante asiático.

Expertos del sector alertan de que, además del efecto en términos de competencia y pérdida de competitividad para las empresas europeas, el principal riesgo es para los consumidores. Tres de cada cuatro productos peligrosos notificados en el sistema Safety Gate europeo proceden de fuera de la UE, y buena parte de los artículos vendidos en plataformas extracomunitarias no cumple la normativa comunitaria en seguridad o trazabilidad.

Una investigación de asociaciones de consumidores europeas –en la que participó la OCU– reveló que el 65 % de los artículos analizados de Temu eran defectuosos y que, en el caso de Shein, el porcentaje ascendía al 73 %, mientras que uno de cada cuatro fue considerado potencialmente peligroso. Entre las irregularidades detectadas figuraban niveles elevados de metales pesados en ropa y joyas, juguetes con compuestos prohibidos en la UE y cosméticos sin información sobre ingredientes.

«Es una situación preocupante», apuntan desde Anged. «Rompen las reglas del juego con el resto de las empresas y del comercio en Europa», añaden. La patronal advierte además de que España –y especialmente Canarias, por su exención de IVA– se ha convertido en un punto de entrada especialmente atractivo para estas plataformas. Por ello reclaman instrumentos legales que permitan limitar o restringir la entrada en el mercado a aquellos operadores que incumplan reiteradamente la normativa.

El Ministerio de Industria ha recibido a Anged en varias ocasiones y, aunque asegura estar trabajando junto a Bruselas, el sector no ha notado resultados. Más llamativa es la posición del Ministerio de Consumo que, según la patronal, parece haberse desentendido completamente del asunto.

Fin a la exención
La Unión Europea ha anunciado que eliminará, a partir del 1 de enero de 2026, la exención de derechos de aduana para las mercancías con un valor inferior a 150 euros procedentes de terceros países. Se trata de una solución transitoria para empezar a recaudar derechos sobre los paquetes del comercio electrónico antes de la puesta en marcha de la EU Customs Agency y del EU Data Hub, previstos para 2028.

En un comunicado, la Comisión explica que «dada la evolución del modelo de comercio electrónico, esta exención ya no está justificada y crea una competencia desleal» y que la eliminación del umbral pretende «equilibrar el comercio electrónico y el minorista tradicional».

Bruselas sigue así el ejemplo de Estados Unidos, que el pasado verano canceló el vacío legal que eximía del pago de aranceles a los envíos por valor de menos de 800 dólares en un claro mensaje a las plataformas chinas. También Reino Unido prevé adelantar la prohibición para los paquetes de menos de 135 libras, prevista actualmente para marzo de 2029.

Pero el ejemplo más drástico lo ha dado Francia, tradicionalmente proteccionista. El país ha aprobado una tasa de dos euros a los envíos extracomunitarios y los vendedores llevan tiempo presionando contra estas plataformas. No obstante, ha sido el escándalo de las muñecas sexuales con apariencia infantil lo que ha llevado al Gobierno a iniciar el procedimiento para suspender temporalmente a Shein, una decisión que podría extenderse a otras compañías.

La patronal española –a diferencia de sus homólogos franceses– no está a favor de una demanda colectiva ni de tasas que acaben repercutiendo en el consumidor y se limita a pedir el cumplimiento de las normas. Aunque está claro que, dada la alta penetración de las plataformas chinas en el mercado español, el fin de estas gangas abre un nuevo abanico de oportunidades para los vendedores. La consecuencia negativa, sin embargo, es que el cambio acabará derivando en un encarecimiento de los productos y una menor disponibilidad de chollos para el consumidor.