Un grupo de científicos de Estados Unidos crearon una prueba de sangre basada en la combinación de la secuenciación del genoma del paciente, capaz de detectar cáncer y controlar el progreso de la enfermedad sin necesidad realizar biopsias.
El hallazgo fue realizado por un equipo de científicos del Centro de Cáncer Kimmel de la Universidad Johns Hopkins, en Baltimore y de acuerdo a las publicaciones se basa en la combinación de la secuenciación del genoma del paciente para detectar en la sangre los cambios en el ADN que indican la presencia de la enfermedad.
Según los investigadores esta técnica todavía es muy costosa, pero están esperanzados que con los rápidos avances en la tecnología de secuenciación genómica, quizás se pueda encontrar una manera de hacerlo más económico.
Este mismo había desarrollado una técnica de secuenciación genómica para seguir la progresión del cáncer de una persona, de acuerdo a los cambios generados en el material genético de su tumor.
“Esta es una prueba del principio de que la secuenciación del genoma para identificar alteraciones cromosómicas puede ser una herramienta poderosa en la detección de ADN de cáncer en la sangre y, potencialmente, de otros fluidos corporales”, explicó la Dra. Rebecca Leary.
Esta prueba también puede utilizarse para monitorear la progresión del tumor y decidir cuál es el mejor tratamiento para el paciente. Por su parte, los científicos creen que la prueba podría ser menos precisa para detectar el ADN de tumores en sus primeras etapas, ya que los involucrados en el estudio tenían cáncer avanzado. Pero con una secuenciación más amplia podría superarse ese problema, agregan.