Esta madrugada se han producido de nuevo violentos enfrentamientos entre Policía y manifestantes que trataban de bloquear la entrada de las Oficinas centrales.
Esta madrugada se han producido de nuevo violentos enfrentamientos entre Policía y manifestantes que trataban de bloquear la entrada de las Oficinas centrales del Gobierno. Miles de personas se concentraron en la acampada de Admiralty, en la Isla de Hong Kong y a escasos metros del Parlamento, siguiendo la llamada hecha horas antes por Scholarism y la Federación de Estudiantes, dos de los grupos que lideran las protestas que sacuden Hong Kong desde hace mas de dos meses. Tras varias horas de tensa calma los enfrentamientos comenzaron a última hora de la tarde del domingo, y se mantuvieron hasta altas horas de la madrugada, provocando el cierre de toda actividad en las oficinas gubernamentales durante el día de hoy. Fuentes policiales hablan de casi cincuenta detenidos y decenas de heridos, incluidos varios miembros de las Fuerzas de Seguridad, que se vieron en muchos momentos superados ampliamente en número por los manifestantes.
Tras lo ocurrido durante la madrugada, el Gobierno ha emitido un comunicado al medio día en el que condenaba los hechos: «La sociedad no debería aceptar los actos ilegales de violentos radicales que repetidamente se enfrentan a la policía».
Pocas horas después comparecía en rueda de Prensa el jefe ejecutivo Leung, En su discurso aseguró que el Gobierno no quiere arrestar gente en las protestas. Los manifestantes deben levantar el campamento y marcharse a sus casas. No es la intención del Gobierno obligarles a hacerlo por la fuerza. «Si los arrestamos, tendrán antecendentes criminales, y no podrán trabajar ni estudiar en el extranjero», manifestó. Al mismo tiempo, envió un mensaje de aviso tanto a los líderes estudiantiles como a los manifestantes que llevan desde hace una semana con enfrentamientos continuos con la policía. Hong Kong está siendo extremadamente tolerante con este movimiento, pero esta tolerancia está llegando a su límite. La gente no debería cometer el error de creer que la Policía no es capaz de controlar las protestas. «Por favor, no confundáis tolerancia co incapacidad de manejar la situación. No penséis que la Policía es débil», declaró.
Por su parte, Alex Chow, secretario general de la Federación de Estudiantes, catalogó la acción de anoche como un éxito. «Nuestro objetivo era parar la actividad gubernamental en el día de hoy, y lo hemos conseguido. Las oficinas centrales están paralizadas», anunció en un discurso en el campamento de Admiralty esta tarde.