El secretario de Finanzas irá para reanudar las negociaciones con acreedores que tienen sentencia firme por la deuda. El Gobierno contratará a nuevos abogados para la gestión.
El secretario de Finanzas, Luis Caputo, viajará el lunes a Nueva York, con el fin de iniciar formalmente las negociaciones con los holdouts que ganaron a la Argentina un juicio por el default de 2002, en un encuentro que tendrá lugar el próximo miércoles.
Según confirmaron voceros del Ministerio de Hacienda, el próximo 13 de enero tendrá lugar un encuentro con el mediador Daniel Pollak y los representantes de los holdouts . Caputo viajará solo, mientras que el titular de Hacienda, Alfonso Prat Gay permanecerá en Buenos Aires, a pesar de que hubo versiones que indicaban que también iría a Nueva York.
El secretario de Finanzas argentino ya estuvo la semana pasada en la ciudad norteamericana en oportunidad de mantener conversaciones con estudios de abogados. Allí, Caputo transmitió a Pollack el interés de la Argentina por reanudar las negociaciones con los acreedores que tienen una sentencia firme contra la Argentina por unos 1.330 millones de dólares, sin contar los intereses devengados desde el fallo hasta la actualidad.
Nuevos abogados
Según informó Prat Gay la semana pasada, la Argentina procura la contratación de nuevos estudios de abogados en reemplazo del tradicional bufete Cleary Gottlieb, que desde hace tres décadas asesora al Estado nacional en el manejo
de deuda.
Prat Gay considera que Cleary Gottlieb no fue eficiente en el manejo del conflicto con los fondos buitre y desconfía de mantenerlo al frente de las negociaciones finales.
La Argentina enfrenta la eventualidad de pagar al menos unos 10 mil millones de dólares si a los juicios ganados por los fondos se le suman los denominados “me too” , acreedores en condiciones de litigar y obtener el mismo resultado favorable a sus reclamos.
Antecedentes
Las demandas contra el país se iniciaron en 2006 tras el cierre del primer canje de la deuda dispuesto por el expresidente Néstor Kirchner. En ese momento, los holdouts que obtuvieron sentencia favorable en los tribunales de Nueva York tenían bonos en default sólo por unos 600 millones de dólares.
El Gobierno de la expresidenta Cristina Fernández procuró evitar la negociación con los fondos buitre. El exministro de Economía, Axel Kicillof, trató de fijar condiciones al remarcar que, en caso de un acuerdo, no iba a autorizar beneficios superiores a los que entraron a los canjes de 2005 y 2010.
De acuerdo con las principales calificadoras de riesgo crediticio, el país se encuentra en situación de “default técnico” o “default selectivo”, como consecuencia del incumplimiento de pago con los bonistas que entraron a los canjes de deuda, debido a un interdicto dispuesto por el juez Thomas Griesa.
La Argentina necesita cerrar ese frente externo para lograr un retorno al financiamiento internacional, a tasas bajas, ante la fuerte caída de reservas del Banco Central que sufrió en los últimos dos años.
Ratificación
Pasar por el Congreso. Días atrás, el ministro de Finanzas Alfonso Prat Gay dijo que, de existir un acuerdo con los holdouts, el Gobierno buscará su ratificación en el Congreso. “Queremos resolver esto lo antes posible; hay también inversores en Europa esperando una resolución”, expresó.