El director de la empresa cordobesa Life SI, dedicada al desarrollo de sistemas de impresión 3D se refirió en la 99.9 a la denominada Bioimpresión que permitirá genera órganos. “Apunta a la fabricación de órganos y tejidos artificiales biológicos, funcionales pero fabricados de forma artificial”, agregó.
La ciencia ficción está cada vez más cerca de ser definitivamente ciencia y cada vez menos ficción. En la 99.9 el Director de Life SI, empresa cordobesa dedicada al desarrollo de sistemas de impresión 3D para investigación, Adén Díaz Nocera se refirió a las bioimpresoras 3D con las que cuentan.
En principio explicó que “una bioimpresora es una impresora 3D que nos permite trabajar con materiales de origen biológico. En algunos casos directamente con células. Esto apunta a la fabricación de órganos y tejidos artificiales biológicos, funcionales pero fabricados de forma artificial”.
La generación de este tipo de productos, tiene dos objetivos muy claros: “se podría utilizar para las personas que necesitan un transplante y se puede crear un órgano de la nada. Nos ahorraría el problema de la lista de espera y se pueden hacer con las células del propio paciente por lo que no habría un rechazo del órgano o tejido. Esto está en etapa de investigación en todo el mundo pero no se ha implantado todavía ningún órgano”.
Life SI es un emprendimiento que tuvo la visión de saber que esto tendrá una aplicación directa en los próximos años y los investigadores necesitarían de este tipo de tecnología para desarrollar su tarea: “el desafío como empresa era desarrollar esta tecnología en la Argentina para que investigadores argentinos puedan trabajar. La falta de recursos desde el punto de vista de los equipamientos no sea un impedimento para la capacidad que tienen los investigadores”.
El cambio que puede generar la aplicación de este tipo de órganos es realmente un elemento importante: “es tan disruptivo que rompe con la necesidad de un donante que en muchos casos debe ser cadavérico. No es la única tecnología que se está estudiando pero es una que utiliza más la electrónica y el software”.
Por último, explicó como es el proceso para “imprimir” un órgano: “el procedimiento es tomar imágenes de un paciente específico y a partir de eso, se puede hacer un modelo 3D virtual y se selecciona el material y las células con las que se imprime, se carga una jeringa en la impresora y se manda a imprimir”, resumió.