Negocian un préstamo de u$s5.500 millones. El ministro de Finanzas francés, Bruno Le Maire, advirtió que la automotriz no debe cerrar plantas y la alentó a mantener tantos puestos de trabajo como sea posible.
El pesimismo en la industria automovilística europea se intensificó después de las declaraciones del ministro de Finanzas francés Bruno Le Maire en las que advertía de que Renault podría llegar a desaparecer si no recibía ayuda pronto y de que un medio japonés publicara que Nissan podría recortar su plantilla en más de 20.000 empleados, muchos de ellos en Europa.
El ministro de Finanzas francés Bruno Le Maire, que está considerando un préstamo de €5.000 millones (u$s5.500 millones) a Renault para ayudarla a superar la crisis, advirtió que el futuro de la empresa estaba en juego, informó la agencia Reuters.
“Sí, Renault podría desaparecer”, dijo a Radio Europa 1.
Le Maire dijo que la planta francesa de Renault en Flins no debe cerrar y que la empresa debe ser capaz de mantener tantos puestos de trabajo como sea posible en Francia, pero también dijo que necesita adaptarse y ser competitiva.
Renault se negó a comentar las palabras de Le Maire.
Por otra parte, la agencia de noticias nipona Kyodo dijo que Nissan podría eliminar 20.000 puestos de trabajo, principalmente en Europa y en países de economías emergentes.
Dos personas con conocimiento del asunto dijeron a Reuters que el número de recortes no se había concretado. Nissan, por su parte, se negó a hacer comentarios.
El fabricante de automóviles japonés dijo en julio del año pasado que recortaría 12.500 empleos, casi el 10% de su plantilla de 140.000 personas. Si eleva esa cifra a 20.000, igualaría a grandes rasgos el número de puestos de trabajo que eliminó durante la crisis financiera mundial de 2009.
Fuentes familiarizadas con el proceso dijeron a Reuters a principios de este mes que la dirección de Nissan se había convencido de que necesitaba ser mucho más pequeña y que probablemente recortaría un millón de autos de su objetivo de ventas anuales, al tiempo que veía un mayor papel para Estados Unidos y China en las ventas de vehículos.
Fuentes consultadas también han dicho que planean reducir su negocio europeo para centrarse en los vehículos deportivos y comerciales, incluyendo posiblemente el cierre de una planta en Barcelona, España, que da trabajo a alrededor de 3.000 personas.
Renault y Nissan han estado en una alianza automovilística durante las últimas dos décadas y deben anunciar una actualización de su estrategia el próximo miércoles.