El periodista freelance habló en la 99.9 desde Nueva York, uno de los epicentros de los disturbios y saqueos en Estados Unidos luego del asesinato de George Floyd.
El crimen de George Floyd a manos de un policía blanco, ha traído una ola de incidentes, violencia, incendios y saqueos como pocas veces se ha visto en Estados Unidos.
Desde Nueva York, uno de los epicentros de las manifestaciones, el periodista freelance Argemino Barro contó sus sensaciones a través de la 99.9: “aquí hay mucha gente muy enfurecida, ayer teníamos en Nueva York 8 mil policías desplegados. Hay mucha furia en la calle y la policía está siendo desbordada. Hubo 400 detenciones en la noche del sábado y más de 50 patrullas incendiadas. Anoche hubo saqueos en pleno centro de Manhattan y es una situación realmente preocupante“.
No se trata sólo de la ira generada por la muerte de Floyd, sino que se empiezan a mezclar distintos factores para ejecutar una serie de saqueos que poco tienen que ver con la bronca por la desigualdad racial: “hay una mezcla de motivos, hay algunos que son de oportunismo y codicia. Hay otros llevados por la rabia de este tipo de hechos que se repiten. También hay una estrategia porque sino uno hace una marcha pacífica, la CNN no va a cubrirlo en el lugar, pero si uno incendia una ciudad lamentablemente empieza a paralizar al país obligando al gobierno a hacer algo”.
En medio aparece la disputa política entre los que apoyan y los que rechazan al presidente Donald Trump en un país con características particulares: “estamos en un país muy polarizado. Los que apoyan a Trump lo hacen con un fervor casi religioso como quienes lo contradicen. La gente que lo rechaza está en un 53% mientras que quienes lo apoyan están en un 40%, los indecisos han desaparecido”, remarcó Barro.
Ahora la amenaza de tener el ejército en las calles parece algo extremo pero viniendo de Trump, podría darse en cualquier momento y hay cierta preocupación al respecto porque no se trata sólo de la Guardia Nacional a la que el periodista definió como “un ejército light que apoya a la policía y depende de los gobernadores”.