El ex candidato demócrata adquirió su tercera propiedad. En Twitter las críticas se multiplicaron.
La noticia salió en un periódico de Vermont, el lugar en el mundo de Bernie Sanders, el senador que provocó un dolor de cabeza en la campaña de Hillary Clinton durante las primarias demócratas. El carismático dirigente adquirió lo que para muchos se trata de una “mansión” por 575 mil dólares en una isla del Lago Champlain. Y la furia de sus seguidores y sus opositores explotó en las redes sociales. “Hipócrita” es una de los más suaves adjetivos que le dedicaron.
Durante sus años de política, Sanders se mostró ante la sociedad como un hombre extraño a los placeres típicos de su profesión. Sin grandes trajes, sin grandes lujos, sin grandes nexos con los hombres de negocios de los Estados Unidos, el senador consiguió forjar una imagen de todo lo que las nuevas generaciones pretenden de un político.
Sin embargo, la noticia que salió en el diario Seven Days, de Vermont, impactó entre sus fans y entre quienes siempre miraron con desconfianza al precandidato a la Casa Blanca, visto por muchos como un peligroso “socialista” norteamericano. Acusado de haberse comprado una “mansión”, el líder demócrata adquirió la propiedad para sus vacaciones de unos 170 metros cuadrados, según confirmó su vocero Michael Briggs.
Ese periódico local informó que la nueva vivienda de Sanders posee cuatro habitaciones y está a tan solo 150 metros del gran lago. “Viajamos a las islas muchas veces en estos años. Nos impresionamos con la comunidad de North Hero -la isla donde compró la propiedad-, comimos en la Casa North Hero y en Shore Acres y lo recomendamos a los amigos que buscaban un lugar hermoso para estar o cenar. St Anne Shrine en la Isla La Motte es mi iglesia favorita y está cerca”, comentó la esposa del senador, Jane O’Meara Sanders.
Pero no es la supuesta “mansión” lo que enfureció a los usuarios de las redes sociales, sino el doble estándar y la capacidad del demócrata para adquirir propiedades. Esta es su tercera vivienda, lo que lo coloca como un “millonario” de facto.
Los Sanders tienen una casa en Capitol Hill, en Washington DC y una más en New North End, Burlington, muy cerca de donde adquirieron la nueva. Esta de verano es su terceralo que causó indignación. Creen que el “socialismo” y el real estate no comulgan entre sí. Incluso lo acusan de haber usado el dinero de las donaciones de sus partidarios para adquirirla.
“¿Bernie Sanders compró su casa de playa de 600 mil dólares con las pocas donaciones de sus seguidores o con el pago de Hillary y los demócratas?”, se preguntó el usuario Feisty Floridian.
Otro, llamado Paul Joseph Watson, indicó: “El socialisat champagne Bernie Sanders compra su tercera casa, un chalet de 600 mil dólares frente a un lago”.
Otro usuario identificado como Norway Ski Warfare señaló: “Bernie Sanders usó dinero de donaciones… para comprar una casa de lago por 600 mil dólares”.
“Cuando te das cuenta de que Bernie Sanders usó tus 27 dólares de donación para comprarse una nueva casa de verano”, ironizó I, Hoebot mostrando una imagen de Michael Phelps enojado.