El presidente del Centro de Constructores y Afines, Norberto Cánepa, fue muy crítico en la 99.9 con la falta de resolución en la provisión de gas para las nuevas obras. “Camuzzi no dio solución a la problemática, hay cerca de 100 viviendas sin gas y 20 edificios en las mismas condiciones”; precisó.
La falta de provisión de gas para nuevas obras en la ciudad es un problema de larga data que sigue sin solucionarse. El presidente del Centro de Constructores y Afines, Norberto Cánepa se refirió al tema en la 99.9 y destacó la inacción por parte de la empresa además de su discrecionalidad para brindar el servicio: “venimos instalando este tema desde marzo. La realidad es que si bien hubo gestiones del municipio y hasta la firma de un convenio, Camuzzi no ha dado solución a la problemática, es decir brindar nuevos servicios a muchos usuarios”, comentó.
Algunos pueden contar con el servicio y otros no; en lo que parece una decisión exclusiva del organismo pero con criterios extraños. “Es una actitud extraña porque es contradictoria y discriminatoria la medida. En algunos casos ha dado algunos natatorios en la ciudad y otros los ha negado. Es muy extraño y nos encuentra en un final político a nivel local, provincial y nacional sin ninguna solución. Hay cerca de 100 viviendas sin gas y 20 edificios en las mismas condiciones”, puntualizó.
Uno de los reclamos más importantes tiene que ver con el pedido de dinero a los vecinos que están construyendo para terminar una obra que podría darles gas más adelante: “Camuzzi le dice a los vecinos que deben pagar un tramo del nuevo gasoducto para los nuevos usuarios, pero no sabemos a ciencia cierta si técnicamente esto es real o no. No hay nadie que lo pueda decir y ENARGAS mira para el costado”.
Lo cierto es que desde un primer momento no hubo respuestas concretas y nadie las da tampoco. “Hemos quedado a la deriva. Hay mucha preocupación por la continuidad de las obras, porque la ciudad está con un índice de desocupación muy grande. Esto provoca pérdidas de puesto de trabajo, la provincia nunca acusó recibo”, referenció sobre los problemas que se generan.
La postura que han establecido es muy crítica para con Camuzzi y también los funcionarios que deben interceder para que se cumpla con lo debido: “el que compre un metro cuadrado se va a comprar un problema a futuro. Entendemos que es un apriete y han tomado de rehén a toda la comunidad para resolver su propio problema”, advirtió Cánepa.
Por último, reclamó que en el nuevo gobierno se pueda empezar a hablar el tema con mayor seriedad: “no nos olvidemos que es un servicio público. Quisiera ver que pasa si a las personas no las proveen más de electricidad, por ejemplo, sería un caos. Habrá que empezar a hablar de los temas que exige la población”, concluyó.