El proyecto tiene media sanción en Diputados. Los condenados por esos delitos ya no podrán gozar del beneficio de las salidas transitorias ni de la libertad condicional.
El Senado se prepara para arrancar el tratamiento de un proyecto de ley de urgente actualidad: la modificación del régimen de ejecución de las penas para los autores de delitos violentos. De aprobarse la iniciativa, que ya cuenta con media sanción de Diputados, los condenados por homicidios, robos con armas de fuego y violaciones ya no podrán gozar del beneficio de las salidas transitorias ni de la libertad condicional. Deberán cumplir de manera completa sus condenas.
Aunque parece un reflejo legislativo al crimen de Micaela García, la joven de 21 años asesinada en Gualeguay por un violador que había obtenido el beneficio de la excarcelación antes de cumplir toda su condena, en verdad la iniciativa es muy anterior. Fue impulsada el año pasado por el diputado radical por Mendoza Luis Peltri y aprobada por la Cámara de Diputados el pasado 23 de noviembre.
Ingresó el Senado dos días después, el 25 de noviembre. Estuvo, incluso, en el temario de iniciativas que el Poder Ejecutivo habilitó tratar en la pasadas sesiones extraordinarias, pero nunca llegó siquiera a discutirse en comisión.
El próximo martes hay prevista una reunión en el Senado entre los líderes oficialistas y opositores, Federico Pinedo, Ángel Rozas y Miguel Ángel Pichetto, los presidentes de las comisiones de Seguridad Interior, Sigrid Kunath, y de Justicia, Pedro Gustavino y la la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, que avala el proyecto. Se espera que ese día se diseñe la hoja de ruta para su tratamiento, que podría arrancar ya el 26 de abril.
Petri dijo: “Así como en el Código Penal debe existir un régimen diferencial para delitos particularmente violentos, los que cometieron esos delitos no pueden tener la misma modalidad de ejecución que los que cometieron, por ejemplo, un hurto”.
Petri agregó: “Lo que persigue el proyecto es simple. El cumplimiento de las condenas, no el agravamiento de las condiciones de detención”.
De aprobarse la ley, los condenados por estos delitos violentos no tendrán la posibilidad de acceder a la libertad condicional, beneficio que actualmente pueden solicitar al cimplir los dos tercios de su pena. Tampoco tendrían salidas transitorias, beneficio que ahora se puede pedir al alcanzar la mitad de la condena., aunque cumpliendo una serie de requisitos.
Cuando el proyecto fue tratado en Diputados hubo protestas en cárceles.