Un grupo de especialistas británicos creó un parche para quemaduras que se ilumina cuando la herida se infecta. Con esta tecnología se podrían salvar a algunos niños antes que las infecciones de sus quemaduras lleguen a ser fatales.
Para los médicos, uno de los problemas más difíciles es diagnosticar con rapidez infecciones de quemaduras en niños. De hecho, el resultado de las pruebas para determinar si una herida está infectada puede tomar hasta dos días. El problema es que los niños son muy sensibles a los efectos de la infección, ya que pueden desarrollar muy rápido una condición llamada “síndrome del shock tóxico”, que si no se trata a tiempo puede ser fatal.
El vendaje fue desarrollado por científicos de la Universidad de Bath, y lo realizaron en base a nano cápsulas que contienen un tinte que se activa con la presencia de la bacteria que causa la enfermedad. De esta manera, los doctores pueden revisar rápidamente si hay infección con tan sólo fijarse si el apósito brilla.
Hasta ahora, el vendaje solamente se ha probado en muestras de piel de laboratorio. El doctor Toby Jenkins, del departamento de Química Biofísica de Bath y jefe del proyecto, explicó que “el gran problema para los médicos es el diagnóstico rápido de la infección. Los métodos actuales tardan entre 24 y 48 horas en responder si la lesión está infectada. No obstante, nuestro vendaje para quemaduras ofrece un sencillo cambio de color bajo la luz UV si es patógeno, si la bacteria que causa la enfermedad está presente en la quemada. Lo que significa que los clínicos pueden ser alertados con rapidez ante una infección potencial”.
La doctora Amber Young, del Centro de Quemaduras Pediátricas del Hospital Frenchay en Bristol, Inglaterra, y consejera del proyecto, señaló que no hay una forma fácil de determinar cuando un niño con una quemadura pequeña desarrolla fiebre, lo quiere decir que hay una infección bacteriana o sencillamente que se trata de una gripe o resfriado. “Actualmente, lo que hacemos es retirar el vendaje para hacer pruebas y descartar la infección, lo que significa que el proceso de curación se ralentiza y aumenta la posibilidad de dejar una cicatriz de por vida, lo que es muy inquietante para el niño. Con este nuevo apósito podremos detectar los signos tempranos de infección, lo que nos permitirá diagnosticarla y tratar al niño con rapidez”, afirmó.