El Miembro de la Academia Nacional de Educación habló a través de la 99.9 acerca de las consecuencias del año de presencialidad perdido y sobre las opciones que se deben dar pensando en 2021.
La educación es un problema central en la Argentina y la situación de pandemia traerá más inconvenientes a futuro pensando que no hubo presencialidad en todo el ciclo lectivo.
El Rector de la Universidad del CEMA y Miembro de la Academia Nacional de Educación, Edgardo Zablotsky, indicó a través de la 99.9 que es necesario empezar a analizar no sólo el impacto que todo esto traerá, sino también la forma de regresar a la presencialidad el año próximo: “estamos tan obsesionados con el corto plazo que perdemos la visión del largo plazo. En la educación argentina, ya los resultados de exámenes demuestran que estamos en una mala situación y no se está viendo a todos los chicos que están desertando del secundario y no van a volver. Es un capital humano imposible de recuperar”.
Las diferencias que quedaron evidenciadas en todo el país con el acceso a las conexiones, también llevaron a replantearse muchas situaciones: “este año no hubo clases, esta es la realidad. Hay que empezar a pensar en marzo de 2021, que puedan ir a clases. Hoy por más que vayan a clases los chicos, no salen bien preparados y si no van a clases, es peor”.
La afectación del COVID-19 no parece ser un argumento lo suficientemente sólido porque en realidad donde se debe poner el acento es en el transporte hacia el establecimiento educativo: “está comprobado que el riesgo para maestros y no docentes no es mayor en esta actividad que en otras. Afortunadamente los chicos no son supercontagiadores. El tema pasa por el transporte público que pueden representar el principal problema, hay que empezar a trabajar en eso”.
El menos, lo que plantea Zablotsky es que se pueda optar en 2021 por tener una educación presencial porque puede haber opiniones encontradas en las familias respecto de la necesidad del regreso al aula. “Tiene que estar la opción de volver al colegio o bien seguir con la educación virtual porque hay familias que no querrán que los niños vuelvan a clases e incluso algunos maestros que no podrán ir a la escuela. Para muchos chicos que viven en situaciones sociales lamentables, el lugar más seguro es un colegio”.
Ante esta situación de incertidumbre y la confusión propia de todo lo que se habla; los gremios docentes, esta vez accionaron en contra de las necesidades: “los gremios docentes se oponen a la vuelta a clases, son un factor importante en todo esto. Hay que blanquear temas como el salario del docente que debe representar la contribución que hace a la sociedad”. Oir último agregó que “negar que este año ha sido una catástrofe es meter la cabeza debajo de la tierra”.