La vecina Norma Urchipia, que trabajó durante años en la problemática del cáncer junto al Dr. Alberto Algamiz, primer oncólogo de la zona sur de la Provincia de Buenos Aires, destacó que la actual Unidad de Oncología del CEMA es el proyecto que en su momento presentó el concejal Guillermo Schütrumpf en base a lo planeado por el destacado profesional, quien incluso recibió el mérito ciudadano. “Es una injusticia muy grande”, dijo en la 99.9.
La costumbre que tiene Acción Marplatense de hacer propios proyectos ajenos, no es una novedad. Pero una de sus máximas banderas en los últimos años ha sido el CEMA; especialmente, con el proyecto oncológico, robado a uno de los profesionales más importantes de la ciudad.
En su momento, el Dr. Alberto Algamiz, miembro fundador y docente del Grupo Argentino de Tratamiento de Tumores Sólidos, presidente de la Sociedad de Cancerología del Sudeste de Buenos Aires y, además, primer oncólogo que tuvo el Hospital Interzonal General de Agudos y el Materno Infantil de Mar del Plata, había puesto a consideración una idea que tenía que ver con la construcción de una unidad oncológica en la ciudad.
Por entonces, después de muchas reuniones, recogió el guante el entonces concejal Guillermo Schütrumpf, pidiendo la creación del Centro de Oncología Municipal. En aquellos días dijeron que no se podía hacer por una cuestión presupuestaria. Años después, apareció Acción Marplatense llevando a cabo la misma idea como propia y sin siquiera tener en cuenta al Dr. Algamiz, a quien incluso ya se le había otorgado el Mérito Ciudadano.
Esta falta de respeto absoluta despertó el enojo de varios allegados del reconocido profesional, que saben de su tarea en el proyecto. Al respecto, habló esta mañana en la 99.9 Norma Urchipia, quien trabajó junto con Algamiz y además padeció de cáncer: “es una injusticia muy grande. Este proyecto salió hace muchos años y el propio Doctor, junto con Schutrumpf, estuvieron reunidos con Pulti. El Intendente se interesó mucho en el proyecto; incluso había dicho que Algamiz lo iba a dirigir. Ferro dijo que en ese momento no se podía hacer”.
Nadie se acercó para ver cómo podían desarrollar la tarea junto con su ideólogo: “cuando llegó el momento de hacer el proyecto en Mar del Plata, lo dejaron afuera de todo, no lo llamaron, no lo consultaron; y eso molesta bastante. Hay poca delicadeza para ni siquiera haberlo invitado para el día de la inauguración y reconocerlo públicamente. El día que le dieron el Mérito Ciudadano no había ningún concejal de Acción Marplatense”, recordó Urchipia.
Tanto el Intendente como los integrantes de su partido tomaron el texto a la perfección y lo llevaron a cabo: “cuando Pulti era concejal junto con Artime, firmaron su voluntad de hacerlo. Ahora lo hicieron, con la cantidad de computadoras que pedía el Doctor en el proyecto”.
La mayor falta de respeto estuvo en el gesto de llamar a Algamiz para decirle que si pretendía el cargo de director en esa unidad, debía ir a concurso. Así trataron al primer oncólogo del sur de la Provincia. “El Dr. Ferro lo llamó a Algamiz por teléfono para decirle que para tener el puesto, debía presentarse a un examen, cuando era el único oncólogo consultor del partido y fue de la zona sur el primer médico oncólogo. Eso no tener vergüenza”.
Incluso, Urchipia puso en tela de juicio la capacidad del Dr. Alejandro Ferro para dar recomendaciones: “tengo charlas que ha dado Ferro a docentes donde se ha tenido que callar la boca y salir con el rabo entre las piernas porque lo que estaba aconsejando, a los docentes les parecía increíble”.
Una falta grave del gobierno de Gustavo Pulti, que nuevamente toma como propios proyectos ajenos después de haberlos desechado en la primera presentación.