Harvey arremetió contra Texas como huracán de categoría 4, con vientos de 215 km/hora, azotando las zonas costeras.
La mayor tormenta en golpear Estados Unidos en los últimos 13 años fue degradada primero a huracán de categoría 1 y, luego, a tormenta tropical, tras registrar vientos máximos sostenidos de 110 kilómetros por hora.
Sin embargo, su lento desplazamiento trae consigo también un aumento de su capacidad destructora pues se espera que siga circulando sobre Texas hasta mediados de la próxima semana.
Se esperan inundaciones catastróficas que continúan siendo una amenaza para la vida.
El gobernador de Texas, Greg Abbott, afirmó que su principal preocupación ahora que Harvey se ha convertido en una tormenta tropical son las “dramáticas inundaciones” que puede causar.
Advirtió que las dos ciudades que están en su ruta prevista, Houston y Corpus Christi, ya han recibido hasta 50 centímetros de lluvia y se prevé que recibirán en los próximos días otro tanto, antes de que la tormenta se disipe.
Hasta ahora, la única víctima mortal se reportó en Rockport. El alcalde de esa localidad, Charles J. Wax, dijo que los edificios y las viviendas han sido duramente golpeados.
“Yo creo que devastación es un término más adecuado que daño estructural. Hay un número significativo de negocios y viviendas que han sido completamente destruidos o han sufrido un impacto significativo desde el inicio de la tormenta”, dijo Wax en declaraciones a la BBC.
“Todos los servicios públicos han sido afectados. Las líneas de comunicación están caídas, igual que el internet, los teléfonos fijos están completamente inoperantes, el servicio de telefonía celular funciona de forma irregular”, agregó.
El presidente Donald Trump firmó una declaratoria de desastre para el estado de Texas, lo que libera fondos de asistencia federal para las áreas afectadas. Luego elogió a los servicios de emergencia por Twitter diciendo: “Están haciendo un gran trabajo -el mundo los está observando! Cuídense”.
El ojo de la tormenta tocó tierra dos veces, primero a unos 50 kilómetros al este de Corpus Christie y luego, cerca de Rockport, entre Port Arkansas y Port O’Connor, una zona que había sido mayoritariamente evacuada.
Pero los servicios de emergencia dicen que una escuela, un hotel, un complejo residencial para ancianos y otras estructuras sufrieron daños.
Horas antes, Harvey ya había dejado fuertes lluvias y sus vientos habían tumbado árboles en el área.
El Centro Nacional de Huracanes (NHC, por sus siglas en inglés) advirtió que la poderosa tormenta se cernirá sobre la región durante varios días y provocará inundaciones que pueden poner en riesgo la vida de pobladores de Houston y sus alrededores.
Además de golpear con vientos de más de 210 kilómetros por hora de velocidad, se registró una elevación del nivel del agua en 3,5 metros, señalan los meteorólogos.
El corresponsal de la BBC James Cook se encontraba cerca de Corpus Christi cuando tocó tierra a eso de las 22:00 horas locales del viernes.
“Caía la noche y ya empezaban las inundaciones con las espumosas olas devorando la carretera”, describió.
A medida que se acercaba a la ciudad, el auto en que viajaba fue empujado por la fuerza del viento a lo ancho de la carretera.
También vio como un edificio en construcción se vino abajo, así como varias gruesas palmeras.
“Esta tormenta es poderosa, peligrosa e intimidante”, afirmó.
Afortunadamente, miles de habitantes acataron las advertencias y cubrieron las ventanas de sus residencias con tablas de madera antes de evacuar la ciudad.
Cuando volvió a toca tierra cerca de Rockport, los vientos se habían reducido un poco a 201 km/hora.
El alcalde de Rockport, Patrick Ríos, declaró que había gente atrapada en un centro residencial de ancianos donde el techo se había caído pero los equipos de rescate habían sido incapaces de llegar hasta el sitio, según la cadena de televisión CBS.
Había advertido con severidad a los que no pensaban abandonar la ciudad: “Sugerimos que si se van a quedar, escriban en sus brazos con un marcador su nombre y el número de su seguro social”
A las 05:00 hora local, el Centro Nacional de Huracanes anunció que los vientos había caído a 145 km/hora y el huracán fue degradado a categoría 1.
Posteriormente, a la 13:00 hora local, fue catalogado como tormenta tropical.
Largas colas de tráfico han estado adelantándose al camino de Harvey.
El gobernador Greg Abbot declaró que era obvio que Texas enfrentaba un “gran desastre” y más de 1.000 guardias nacionales están siendo desplegados para asistir a las operaciones de rescate.
Un huracán no llegaba a suelo estadounidense con tanta fuerza desde Wilma y Katrina, que azotaron Florida y Nueva Orleans en 2005.
Wilma dejó 87 muertos y fue parte de una temporada de huracanes récord que incluyó Katrina, que devastó Nueva Orleans y mató a casi 2.000 personas en agosto de ese año.
¿Qué tan malo es Harvey?
El primer impacto de Harvey se produjo cerca de la localidad de Corpus Christi, una ciudad portuaria de 320.000 habitantes.
En las últimas horas, las autoridades habían instado repetidamente a los pobladores de esa ciudad a abandonar el lugar.
Sin embargo, el gobernador Abbott reconoció al final de la tarde del viernes que quedaba mucha gente en Corpus Christi.
El mandatario regional expresó su temor ante la llegada de Harvey a Texas como huracán categoría 4, algo que no sucedía desde Charley, en agosto de 2004.
Según el NHC, Harvey llegó a la costa con rachas de vientos máximos sostenidos de 205 km/h.
¿Por qué es tan peligroso?
Pero los fuertes vientos de Harvey no son el único peligro que acecha Texas.
Las oleadas en las costas y las intensas precipitaciones vuelven aún más complejo y peligroso este fenómeno climático.
Las olas en las costas podrán alcanzar hasta cuatro metros de altura. Y eso es una de las cosas que más preocupan a las autoridades.
Pero además, los meteorólogos advirtieron que volúmenes “extremadamente altos de lluvia” causarán “inundaciones históricas” en diferentes áreas en Texas.
Además, el ojo de Harvey se traslada particularmente despacio, a 15 km/h, lo que multiplica el efecto devastador ya que el azote de las ráfagas de viento permanece más tiempo.
De acuerdo con el recorrido previsto, tras ingresar a Texas, Harvey después volverá sobre su camino de vuelta al mar para girar hacia el este y seguir castigando la costa.
El giro lo pondrá rumbo a la ciudad de Houston, la cuarta ciudad más grande de Estados Unidos, que podría enfrentar durante varios días hasta 500 milímetros de lluvia.
Pero es más, se estima que Harvey podría detenerse en la zona, precipitando más agua incluso hasta mediados de la próxima semana.
Y eso es lo que lo hace especialmente peligroso.