El fundador de Microsoft, uno de los hombres más ricos del mundo, invierte el 95% de su dinero en proyectos humanitarios. Ahora está interesado en América Latina, donde asegura que su desarrollo pasa por “tener un mejor sistema educativo público”.
En una entrevista a EFE, el magnate y filántropo estadounidense Bill Gates explicó cómo trabaja en la ayuda humanitaria, especialmente en América Latina. Recientemente inauguró en la ciudad mexicana de Texcoco las nuevas instalaciones del Centro Internacional de Mejoramiento del Maíz y el Trigo, dedicado a la investigación en productividad agrícola desde 1966.
Gates consideró que “hay algunas buenas universidades pero, en promedio, la educación pública no es lo que debería ser; especialmente si se compara con el sudeste de Asia”. Y agregó “incluso países de Asia con niveles de riqueza inferiores a los latinoamericanos, hacen un mejor trabajo en educación”.
El también cofundador de la Fundación Bill y Melinda Gates explicó: “nuestra fundación se enfoca en la educación en Estados Unidos. Y esperamos que algunas lecciones en términos de cómo se evalúa a los profesores y se les ayuda a mejorar, o cómo utilizar la tecnología, sean llevadas a nivel global”. Según él, los gobiernos de estos países deberían trabajar más a conciencia en problemáticas de salud y en cómo erradicar la desnutrición, que puede dañar el “desarrollo cerebral de los niños y causarles problemas para alcanzar su potencial máximo“.
Gates trabaja en conjunto con la Fundación Carlos Slim, encabezada por el único empresario en el mundo cuya fortuna le supera. Juntos trabajan desde 2010 en la Iniciativa Mesoamericana en Salud. Pero el magnate estadounidense, al frente de la mayor fundación privada del mundo, con fondos de 30.000 millones de dólares, está dispuesto a asociarse con otros filántropos privados de la región. “Ha sido un viaje emocionante juntos, aprender de salud, agricultura, educación y tomar los programas e implicarse mucho personalmente en estos temas, intentando encontrar a los innovadores, ver cuáles son los mejores modos de alcanzar los resultados”, expresó. “Un gran hito para nosotros fue cuando nuestro amigo Warren Buffet decidió darnos la gran mayoría de su fortuna, también para la fundación. Eso casi duplicó la escala del trabajo que podíamos hacer. Fue muy emocionante e hicimos lo mejor que pudimos para responder a la confianza que había puesto en nosotros”, agregó.
Gates aseguró que “con el tiempo, creo que la filantropía aumentará en todas partes. Y ciertamente, comparto mi positiva experiencia”. Él mismo promueve el Giving Pledge (“La Promesa de Dar”), una opción por la cual los millonarios donan la mitad de sus fortunas a iniciativas filantrópicas.