Los residentes del noroeste del estado norteamericano de Florida disponen hasta las primeras horas de hoy para abandonar sus hogares antes de que el huracán Michael, que ya se fortaleció y pasó a categoría dos, toque tierra como una gran tormenta con consecuencias “potencialmente mortales”.
Al acercarse Michael, las autoridades ya emitieron órdenes de desalojo obligatorio a unas 120.000 personas en la playa de Panama City y a lo largo de las partes bajas de la costa. Se espera que el huracán toque tierra mañana con la peligrosa categoría tres, lo que lo convertiría en la tormenta más poderosa en la zona del Panhandle de Florida (noroeste) en al menos una década.
Un avión cazador de huracanes que ingresó al ojo de Michael mientras cruzaba la punta occidental de Cuba ayer por la noche descubrió que sus vientos iban en aumento. Sin embargo, hoy por la mañana sus vientos máximos sostenidos ya habían alcanzado los 155 kilómetros por hora (100 millas por hora) y se pronosticó que se fortalecerá aún más, con vientos de hasta 179 km/h (111 mph) capaces de causar daños devastadores.
Asimismo, en conferencia de prensa hoy por la mañana, el gobernador Rick Scott advirtió a los residentes a lo largo del noroeste de Florida que el “monstruoso huracán” estaba apenas a unas horas de llegar y que representaba riesgos mortales debido a sus vientos poderosos, marejada ciclónica y lluvias fuertes. Su opositor en la contienda al Senado de Florida, Bill Nelson, dijo que un “muro de agua” podría generar una destrucción grave en el noroeste de Florida.
Los meteorólogos advirtieron que Michael podría dejar caer hasta 30 centímetros de lluvia (un pie) en el oeste de Cuba, además de que podría provocar una precipitación similar en la zona del Panhandle de Florida, con inundaciones repentinas y deslaves en zonas montañosas.
En tanto, las agencias de manejo de desastres de El Salvador, Honduras y Nicaragua reportaron 13 decesos por la caída de tejados y por las crecidas que arrastraron a algunas personas.
Seis personas fallecieron en Honduras, cuatro en Nicaragua y tres en El Salvador. Las autoridades buscan a un niño arrastrado por un río en Guatemala. La mayoría de las precipitaciones se atribuyeron a un sistema de bajas presiones en la costa del Pacífico de El Salvador, pero la presencia del huracán Michael en el Caribe podría haber contribuido.
Scott declaró estado de emergencia en 35 condados de Florida, activó a cientos de miembros de la Guardia Nacional de Florida y se dejaron de cobrar las cuotas en las autopistas para motivar los desalojos.