El senador nacional por la UCR en Tucumán, José Manuel Cano, habló en la 99.9 sobre la situación que se atraviesa en la Caja Popular de esa provincia, donde fueron despedidos 36 trabajadores y eso derivó en el paro nacional de la jornada de ayer. “El gobernador manoteó 180 millones de pesos de la Caja Popular de Ahorro”, denunció.
Tucumán vive horas convulsionadas por lo que se empezó a reflejar a través de la Asociación Bancaria en el paro de 24 horas del día de ayer. La medida llegó a tomarse por un problema suscitado en esa provincia con el despido de 36 trabajadores de la Caja Popular de Tucumán en el marco de un hecho ilegal que realizó el gobierno de José Alperovich.
En la 99.9, el senador nacional por esa provincia, José Manuel Cano, explicó la problemática: “el conflicto bancario tiene que ver con la decisión del gobernador Alperovich el año pasado donde se manoteo 180 millones de pesos de la Caja Popular de Ahorro de la provincia que es una entidad crediticia de la provincia. Esa plata era del fondo de garantías del seguro de la Caja Popular”, remarcó.
Esta resolución, llevó a que se tomaran medidas judiciales que, a su vez, trajeron consecuencias en el manejo de la Caja: “a partir de esa medida que creemos que es absolutamente ilegal, denunciamos al superintendente de seguros de la ciudad con el diputado nacional Manuel Garrido. Como consecuencia de ese conflicto, el interventor de la Caja denunció y Alperovich designó a un personaje nefasto como Armando Cortalezzi que tiene causas penales y un currículum lamentable”, puntualizó.
Cortalezzi fue quien comenzó la serie de despidos: “se inició una persecución en la Caja Popular con aquellos empleados que forman parte de la Asociación Bancaria y en ese contexto hubo casi 36 despidos de personal contratado. Muchos habían ingresado como niños cantores y tenían más de 10 años de antigüedad. Ayer recibió el tema “Nito” Artaza como presidente de la Comisión de Derechos y Garantías, a Sergio Palazzo que es el Secretario General de la Bancaria y para el día 28 está planteado un plenario de la Comisión con el personal despedido para que Alperovich entienda que el estado no forma parte de su feudo familiar”, denunció.
A pesar de que, desde el Gobierno Nacional, se instó a que tomen nuevamente a los trabajadores, se hizo caso omiso en Tucumán: “ha habido un aval del Ministerio de Trabajo de la Nación para que se reincorpore al personal removido de su cargo, pero parece que no tiene valor para el Gobierno provincial. Nosotros estamos acompañando desde el radicalismo, nos parece que 30 años de democracia deben significar un punto de inflexión para aquellos que a la hora de tomar decisiones van en contra del estado de derecho”, indicó Cano.
Claro que no se puede responsabilizar a ningún poder en particular, porque todos dependen del gobernador. “En la provincia, el que hace y deshace es Alperovich. Hay un sistema unitario en la Nación y en las provincias en el vínculo que tiene el gobernador con el poder judicial, legislativo y ejecutivo. Ni siquiera hay reuniones de gabinete”, detalló el senador.
Todos estos manejos que se repitieron en los últimos años, según Cano, se vieron reflejados en las urnas a través de las primarias: “en la última elección la diferencia entre Alperovich y nosotros fue de 140.000 votos, cuando en 2011 estábamos en 400.000 votos. Pasamos del 13% al 27%. Si se suman otras fuerzas políticas no afines al gobierno, sin dudas el primer golpe que tuvo Alperovich en Tucumán, fue que la sociedad le dijo no a la Reforma Constitucional. Hay un fin de ciclo y los excesos que han hecho en la provincia se deben terminar”.