Un grupo de científicos logró descubrir el origen de la grasa mala que se ubica en nuestro cuerpo. Este hallazgo podría ayudar a controlar la formación de grasa mala alrededor de los órganos, y así evitar las enfermedades que se originan con la obesidad.
Científicos han descubierto el origen de la grasa mala que se encuentra en el cuerpo, la cual se vincula con afecciones coronarias, cáncer y otras enfermedades relacionadas con la obesidad, aun si las personas que la llevan parecen esbeltas.
La grasa que se acumula en torno a órganos abdominales como el corazón, el riñón y el intestino, conocida como grasa visceral, se considera un asesino silencioso, porque es posible que las personas la tengan en gran cantidad sin aparentar sobrepeso.
Es más peligrosa que las capas de grasa almacenadas bajo la piel, y ahora investigadores en Edimburgo han descubierto que surge de una fuente distinta, porque deriva de un tipo específico de célula encontrada en el embrión cuando aún está en el útero.
El descubrimiento podría conducir a nuevos métodos de controlar la formación de grasa mala alrededor de los órganos, de modo que se reduzcan las probabilidades de desarrollar esa obesidad que eleva el riesgo de enfermedad grave.