Lograron recapturar a 21 prófugos, pero ambos países aún continúan en alerta máxima.
Este domingo, 35 presos de alta peligrosidad se fugaron del penal de Misiones, ubicado en San Juan Bautista al sur de Paraguay y con el pasar de las horas crece el temor de que hayan cruzado a la Argentina.
Se trata de la megaorganización criminal brasilera Primer Comando Capital (PCC), nacida hace casi dos décadas en las mazmorras de las cárceles paulistas. Las autoridades informaron que 21 de los fugados ya fueron recapturados.
Tras la huida de los reclusos, se desató una crisis en el gobierno de Mario Abdo, quien ya removió al director de la Penitenciaría Regional mientras que el ministro de Justicia, Édgar Olmedo, ofreció su renuncia.
El penal de Misiones se ubica a 100 kilómetros de la frontera con Argentina, a la altura de Itatí, en Corrientes. Por lo que fuentes del Ministerio de Seguridad no descartan que algunos hayan buscado refugio de lado argentino.
En el mismo sentido, el Ministerio de Justicia de Paraguay dispuso la intervención de la Penitenciaría Regional de Misiones por un plazo de 30 días, así como la separación de Virgilio Valenzuela del cargo de director del penal.
El ministro Olmedo declaró que no descartan la hipótesis de que los presos hayan tenido colaboración por parte de los funcionarios del penal y puso en duda sobre la planificación de la fuga que pudo haber sido planeada con anticipación.
También adelantó que todas las penitencierías de Paraguay están en “alerta máxima” para evitar que vuelva repetirse un hecho similar.
Las cámaras de seguridad de la penitenciaria lograron captar el momento de la fuga, según informó ABC Color, e indicaron que los presos redujeron a un guardia y usaron una soga hecha con retazos de tela para escalar.
Entre los que aún continúan prófugos están los líderes del grupo criminal que hace tres años protagonizó lo que se llamó la “masacre de San Pedro”, en la que miembros de PCC degollaron a 10 presos de un clan rival dentro de una prisión.