La presidenta de la Comisión de Legislación Penal del Congreso explicó en la 99.9 que se habla a nivel mundial de 250 millones de dólares por año que se moverían con la pornografía infantil: “es un tema serio que debemos abordar porque Argentina se está convirtiendo en productor”.
La nueva ley que sanciona a quienes posean pornografía infantil, agrega un punto clave en la cadena de condenas para aquellos que están dentro de esta aberrante red. La presidenta de la Comisión de Legislación Penal del Congreso, diputada Gabriela Burgos brindó precisiones en la 99.9 indicando que en realidad “lo que hicimos fue adecuar la legislación a parámetros internacionales, algo que habíamos comprometido en distintos tratados. Había que empezar a hablar de la tenencia de pornografía infantil. La legislación hablaba de los que producían, distribuían o comercializaban; como así también a adultos que facilitaban a menores material pornográfico, pero nunca se detenía en el que posee pornografía infantil”.
Lamentablemente, se ha expandido de tal forma este delito que según lo que aseguró la legisladora: “el negocio que existe a través de niños, niñas y adolescentes que son sometidos contra su voluntad es altísimo. Se habla a nivel mundial de más de 250 millones de dólares que se mueven en esta temática”.
Al momento de aprobar esta nueva figura, hubo un debate importante sobre como afectarían las libertades individuales, pero se terminó llegando a buen puerto: “fue una discusión dentro de la Comisión porque se indica que el simple tenedor estaría rozando la violación del artículo 19 de la Constitución que es la faz íntima de las personas. Acá se protegen los derechos de esos niños y niñas, que sobre pasan la faceta de intimidad de la persona que baja y posee pornografía infantil. Lo enuncié muy claro, el que posee pornografía infantil es un pedófilo y por eso se planteó esta nueva figura que es el simple tenedor”.
Aunque a veces no se tome dimensión del problema, Burgos explicó que ha crecido mucho el consumo de este tipo particular de pornografía: “es increíble la cantidad que se baja minuto a minuto en las redes, no hay limitación en eso. No es algo de Argentina, sino de todo el mundo. Hay que hablar de ciertos materiales que circulan en la web y han facilitado este negocio. Argentina es uno de los 10 países del mundo que mayor cantidad de pornografía infantil baja, a nivel local nos estamos convirtiendo en uno de los mayores productores de pornografía infantil”, advirtió.
Las redes sociales comenzaron a expandir un negocio que de por sí era grande, llegando a límites impensados: “hay pornografía infantil a la carta en la red, aunque suene duro decirlo. Pueden elegir que tipo de niño, de acuerdo a cuales cualidades se solicita, hay pornografía infantil en tiempo real que es abuso sexual…eso está pasando hoy en las redes”, finalizó.