Claudio Salazar es el hermano de Walter Gustavo, quien se encuentra detenido hace casi cuatro meses acusado injustamente de integrar una banda de secuestros virtuales. “Después de que habló mi sobrina en la 99.9, lo llamaron a declarar a mi hermano, algo que le habían negado desde el 8 de enero”, agregó.
El caso de Walter Gustavo Salazar ha tomado notoriedad pública a través del testimonio de sus familiares en la 99.9. Esta mañana, sumó mas datos sobre el desarrollo de la causa judicial el hermano Walter, Claudio Salazar: “estamos en medio del miedo a la policía corrupta y los jueces. Pueden modificar en un segundo la vida de una persona”, advirtió en principio, refiriéndose a lo que les toca vivir.
Las repercusiones después de las notas en “Noticias&Protagonistas” fueron inmediatas: “desde el 8 de enero mi hermano estaba pidiendo una audiencia y se la habían negado. Después de que Valeria (mi sobrina, la hija de Walter) terminó la nota, ese mismo día a las 9 de la mañana lo fueron a buscar a mi hermano para declarar. La exposición pública a ellos no los favorece porque hacen las cosas mal”, remarcó Claudio.
Pero la declaración del imputado fue muy irregular: “no le avisaron a la Defensoría, que llegó a los 40 minutos de la declaración, estaba hablando sin abogados. A mi hermano tampoco le avisaron. La abogada que llegó tampoco es la que lleva la causa de mi hermano, porque está de vacaciones. La cambiaron por otro que ni había leído el expediente. Todas esas irregularidades suenan mal”, agregó.
La causa, más allá de la injusticia que reclaman, tiene muchos puntos oscuros. “Somos gente de trabajo, gente de bien. No es justo lo que está pasando. Hay muchas falencias en esta causa que no tienen sentido y nos damos cuenta nosotros, que nunca tuvimos experiencias de este tipo”, dijo Claudio Salazar.
Por otro lado, dio detalles sobre la investigación que suenan casi grotescos: “les dijo que estaba esperando el 531 en ese momento y el juez tiene dudas so bre si esa línea pasa por ahí, en Luro entre Rioja y Catamarca. Cualquiera lo puede comprobar, todavía están dudando de eso. Presentaron fotos del colectivo pasando por ahí y el juez Castellanos dijo que el defensor oficial podría haber trucado esa foto. Es una locura. Mi hermano pidió que cotejaran los teléfonos, porque lo imputan diciendo que está hablando por teléfono. Llamaron a un arquitecto para el cual trabaja mi hermano y ofreció su teléfono para que vean que estaba hablando con ese señor. Eso lo desestimaron”.
El trabajo del juez Alejando Castellanos ha sido realmente muy dudoso. Para terminar de comprobarlo, Claudio contó que “no estando la defensora, desestimó a la Defensoría diciendo que estaban haciendo todo mal. Es todo muy raro. Desde el sentido común interpreto que si una persona está sentada en la puerta de un banco, delante de las cámaras mostrando su rostro, en una moto que es de su propiedad, no es la forma de operar de un delincuente”.
Mientras todo esto sucede, Walter sigue detenido, aunque no haya pruebas contundentes que lo relacionen con los secuestros virtuales. “Son cosas sencillas de comprobar y no hay necesidad de demorar tanto las cosas”, reclamó su hermano.