El titular de NOAnomics, Felix Piacentini dio a conocer en la 99.9 las cifras del estudio del informe fiscal de provincias que realizaron y confirmó que en la última década “443.000 empleados públicos más que el crecimiento poblacional”. También puntualizó que “en Buenos Aires hay un 37% de crecimiento de empleados públicos de acuerdo al crecimiento poblacional”.
Las cifras del empleo público en el país son realmente pavorosas y uno puede darse cuenta por municipio o provincia cuando se publican algunos números. Sin embargo, tener toda la información junta del país, es aún más indignante.
Félix Piacentini, titular de NOAnomics, explicó detalladamente en la 99.9 el trabajo que realizaron alrededor del informe fiscal de provincias y destacó que “la idea era estimar el empleo público en las provincias en los últimos 10 años y ha crecido un 43% llegando a 2 millones de empleados públicos; contra un 11% que creció la población en el mismo período”.
Lejos de lo ideal, el gobierno nacional se ha excedido en la contratación de nuevo personal: “Una medida racional del gobierno sería asociar el crecimiento de los empleados públicos al crecimiento poblacional, pero la distancia es enorme. Si uno cuantifica esta brecha quiere decir que se han creado 443.000 empleados públicos más que el crecimiento poblacional. De ahí es que hay un excedente de medio millón de empleados públicos en la última década”.
De ese total, se puede hacer un desglose por provincia para saber cuanto ha aumentado en cada una de ellas: “180.000 estarían en la Provincia de Buenos Aires que es el distrito más grande del país. Pero en terminos relativos, hay provincias que tienen más de un 30% de exceso en empleo público como Catamarca que tiene una distancia entre los dos puntos de 63%, Tierra del Fuego 55%, Corrientes 46% y Salta 38%”.
Detallando lo sucedido en nuestra provincia, Piacentini destacó que “en Buenos Aires hay un 37% de crecimiento de empleados públicos de acuerdo al crecimiento poblacional. Esto marca que durante 10 años hubo clientelismo político, ineficiencia del estado, creación de organismos innecesarios y demás”.
Que tantos desocupados sean admitidos por el sistema público, también ayuda a reducir los porcentajes de personas sin trabajo: “esto se puede tomar como un desempleo oculto, ya que para palear el déficit privado se incorpora planta de personal casi como una política social. Hicimos una simulación diciendo que si toda esta gente no hubiera sido absorbida por el gobierno, la tasa de desocupación en el total nacional hubiera aumentado 2,5%.”.
Paralelamente, para poder tomar el casi medio millón de empleados públicos, tendría que haberse generado trabajo en el empresariado: “estimamos también que el sector privado tendría que haber crecido en 45.000 empresas más para emplear en blanco a estas personas si no las hubiera incorporado el estado”.
No sólo se ha convertido en un problema el exceso de personas contratadas por el estado, sino que tampoco han sido repartidos en los sectores donde la sociedad realmente lo necesita: “hay sectores dentro del menú de servicios del estado que necesitan mejorar y aumentar su planta de personal como los casos de seguridad y educación. En seguridad si aumenta la planta de personal es una buena noticia; pero esta distancia tan grande entre el empleo público y el crecimiento de población y los malos servicios, nos indica que no estuvo destinado a los servicios más demandados”, concluyó.