El presidente de la Sociedad de Fomento “Malvinas Argentinas”, Mario Caporaletti, denunció en la 99.9 los intentos de usurpación que hay en la zona. También reclamó por la falta de aportes del Presupuesto Participativo desde 2011 para realizar obras en el barrio. “Cada partida es de 120.000 pesos. En otros lugares las partidas se ejecutan muy alegremente”, aclaró.
El problema de las usurpaciones en los barrios es tan variado como reiterado, y se agrava por la inacción del gobierno de Gustavo Pulti. Esta mañana en la 99.9, el presidente de la Sociedad de Fomento “Malvinas Argentinas”, Mario Caporaletti, se refirió a los conflictos que viven en su barrio y a los pedidos que han hecho para mejorar la situación: “hay una ordenanza en vigencia que indica que la Municipalidad puede tomar y dar en custodia a la Sociedad de Fomento, en forma preventiva, terrenos en aparente estado de abandono. Se les podría poner un cartel y se podrían llegar a contener. En nuestro barrio hubo varios intentos de usurpación, pero pudieron ser parados”.
En algunos lugares hay otros temas que complican aún más el desalojo de los espacios tomados: “tenemos problemas en la zona de la vía, donde son terrenos federales, hay gente que se está asentando y trae inconvenientes para los vecinos; son terrenos que dan a los fondos de las vías. Hay un sector en Strobel donde venimos luchando para abrir un paso a nivel y en cualquier momento nos ocupan la calle. Ahí tiene que intervernir Ferrocarriles, o la Municipalidad directamente”.
Los pedidos no son de ahora sino que se repiten hace más de dos años. Se trata de múltiples reclamos por la apertura de un paso a nivel, algo que a pesar de estar dentro de los planes administrativos, nunca llegó a concretarse: “no hemos recibido el Presupuesto Participativo de 2011, donde estaba prometida la apertura del paso a nivel. Pero no se puede hacer porque Ferrocarriles se niega o pone muchas trabas. La partida está asignada pero no tenemos nada. Pedimos un cambio de partida presupuestaria para que se reasigne a otras cosas que necesitamos. Esa plata debería ir a cosas institucionales, como una sala de computación o bibliotecas, y por otra parte a señalización. Todavía no sabemos qué va a pasar con la partida del año pasado, porque está pedida para hacer una plaza que no tenemos”. Al parecer, y según los dichos de Caporaletti, el retraso se debe a cuestiones políticas: “cada partida es de 120.000 pesos. En otros lugares las partidas se ejecutan muy alegremente. Es uno de los tantos problemas que tenemos”.
Claro que hay varias cosas por solucionar en el Barrio “Malvinas Argentinas”. El presidente de la Sociedad de Fomento detalló algunas: “podemos hablar del estado de las calles, con bacheos que no se han cumplido. Nos hicieron el alumbrado público en un 50%, el resto estaba presupuestado pero esperando una repotenciación, pero no hay caso. Se hizo un centro de salud, pero hay otras cosas que son demanda de los vecinos y no logramos que se concreten. Pasan los años y lo primero que se pregunta la gente es qué hace la Sociedad de Fomento. El vecino a veces no se da cuenta de que no es culpa nuestra. Estamos para gestionar. Pero cuando las respuestas no aparecen, no podemos hacer nada”.
En medio está la interna política vecinalista, que genera mucha opinión a favor del Intendente: “algunos vecinalistas ven pasar la comparsa y se suben, después no saben las consecuencias que trae esto. No es la primera vez que pasa. Con los cambios de gobierno, los que quedan mal parados son los vecinalistas, porque se politiza mucho la situación”, indicó Caporaletti.
Mientras los vecinos reclaman por mejoras, la Federación Vecinalista no cumple con su tarea y separa las aguas entre unos y otros: “tenemos una Federación inexistente y alineada con Acción Marplatense, algo que está mal porque todos los fomentistas no pensamos igual. No soy enemigo de Pulti, cumplimos el rol de fomentistas llevándonos bien con el Intendente para lograr mejoras en los barrios. Acá hay muchachos que se están equivocando”.
También se suma a la discusión el tema de la ilegalidad de algunos actos: “se ha pedido la intervención de la Federación porque hasta hubo una asamblea ilegal avalada por la Dirección de Asuntos de la Comunidad. Bajan programas para hacer reuniones en los barrios e informar los beneficios de trabajar con la Municipalidad. En mi caso personal, bajó a estas charlas Claudia Rodríguez, que jamás se acordó en su gestión de venir a mi barrio a ver siquiera cómo está el tránsito, algo que pedimos. Tuvimos un entredicho que no me cayó muy bien”. Mientras tanto, nadie responde, no llega el dinero presupuestado y el Intendente mira para otro lado: “tengo 10 reuniones suspendidas por Pulti. Creí que era el único, pero tuve la semana pasada una reunión con ocho sociedades de fomento de la zona y estamos todos iguales. Acá se plantea el traslado municipal, pero no sabemos el tipo de obras que se harán para los vecinos, no nos informan”.
Por último, Caporaletti fue crítico con la elección del Defensor del Pueblo y destacó: “me enteré que la semana que viene, entre 24 y 25 de junio, se cierra la inscripción de las instituciones para poder votar. No se publicitó el cronograma para la elección y tenemos el pálpito de que esta situación está media digitada”.