El mecanismo era utilizado para elegir la marca de ciertos prestadores de prótesis; los hacían pasar como “honorarios profesionales”, “consultoría” o “asesoramiento técnico” y cobraban sobreprecios.
A Avelina, 65 años, le indicaron que debe operarse de la cadera. Se atiende por el Instituto de Obra Médico Asistencial (IOMA), la obra social de la provincia de Buenos Aires. El médico le advirtió que tendrá que utilizar una prótesis. La cirugía, sin embargo, se hará esperar. Conseguir una cadera en IOMA puede ser un trámite extenso y costoso.
Como parte de un código no escrito, muchos médicos negocian con las ortopedias proveedoras de IOMA un “pago extra” para elegir su marca. Un soborno disfrazado de “honorarios profesionales”, “consultoría” o “asesoramiento técnico”, de alrededor del 20% de la prótesis, según pudo reconstruir LA NACION como parte de la investigación global Implant Files después de conversar con empresarios, fuentes oficiales, especialistas, médicos y dirigentes de la obra social.
¿Cómo se pagan las coimas para los médicos de IOMA? La Justicia de La Plata investiga si las últimas administraciones de IOMA -incluida la actual gestión- alimentaron ese mecanismo de sobornos al permitir sobreprecios de hasta el 500% en las prótesis que compra la obra social, un negocio que mueve más de $2400 millones, según datos oficiales.
Los proveedores y especialistas consultados por el equipo argentino del Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ) estiman que los sobornos a los médicos equivalen al 20% del presupuesto de IOMA para adquirir prótesis, es decir, pagos ilegales por cerca de $500 millones en 2018.
IOMA acuerda los precios para las prótesis con los proveedores a través de un nomenclador. Esa lista de precios oficial hoy está bajo sospecha de la Justicia. Por ejemplo: la obra social paga $23.230 a las ortopedias por un clavo DHS de cadera (código OSME2), pero la prótesis se consigue a unos $3500 más IVA en el mercado, según un relevamiento de la Asociación de Profesionales de la obra social.
Otro ejemplo: las placas para fracturas (código OSI11) cotiza en el nomenclador de IOMA $30.500, pero ese producto puede conseguirse por $5000 más IVA en el mercado, según el relevamiento realizado por 70 auditores externos que trabajan para la asociación de profesionales que lidera Idelmar Seillant.
“Es evidente que ese 20% de ‘honorarios médicos’ se paga con los sobreprecios de las prótesis que tiene el nomenclador. Este sistema desvirtúa el proceso de compra de prótesis generando enormes perjuicios para la provincia, que paga días de cama de más mientras los médicos realizan esta negociación”, sostuvo la diputada Graciela Ocaña.
La exministra de Salud presentó un escrito ante la oficina anticorrupción bonaerense (Oficina de Fortalecimiento Institucional -OFI-) que ya había recibido una denuncia anónima por hechos similares. “Estas maniobras no se podrían desarrollar sin la connivencia de varios participantes. Por un lado está el médico, pero también las autoridades de IOMA encargadas de fijar los precios del nomenclador”, agregó Ocaña.
En diálogo con el equipo argentino del ICIJ, desde la obra social bonaerense dijeron: “IOMA heredó nomencladores con precios establecidos en la gestión anterior. Al ser elevados, en 2016 se tomó la decisión de pesificar los montos y además, se les quitó un 20%”. Señalaron que desde 2017, el nuevo presidente, Pablo Di Liscia, inició una “evaluación exhaustiva de más de 500 puntos para analizar su valor”. Por último, desde IOMA dijeron que desde el año próximo van utilizarse nuevos nomencladores cuyos insumos “estarán establecidos, entre otros factores, por los valores del mercado”.
El equipo argentino de Implant Files accedió a grabaciones teléfonicas de conversaciones entre médicos de IOMA y proveedores del servicio que ahora están en manos de la Justicia. En esos diálogos, los cirujanos y traumatólogos les piden “honorarios” a las empresas.
-Médico: Es primordial para nosotros el tema de los honorarios.
-Empresa: De los honorarios…
-Médico: Claro…
-Empresa: Escúchame, y ¿qué es lo que tenían en mente?
-Médico: Lo que nosotros teníamos en mente es… Nosotros por una cadera común importada de IOMA nos dan 12.000 o 14.000 (pesos), por una de este tipo yo le iba a pedir 18.000, que es algo lógico porque son módulos muy altos. Eso es lo que nosotros teníamos en mente.
Desde la Asociación de Médicos de la Actividad Privada, el secretario gremial Antonio Di Nanno dijo que “un médico que pide retorno tiene que ir preso”, pero remarcó que esto puede ocurrir sólo “porque no hay un Estado que regule y controle”.
Seillant calculó desde la asociación de profesionales de IOMA que el costo de los sobreprecios en todos los rubros que maneja la obra social de la provincia de Buenos Aires fue de $4800 millones en 2018. “En IOMA no falta dinero; sobran ladrones”, lanzó Seillant.
A partir de las denuncias, la OFI bonaerense inició acciones en la justicia bonaerense. La causa recayó en el fiscal Marcelo Romero, que ordenó que IOMA envíe a la Justicia un listado de las prótesis adquiridas durante los últimos cinco años, qué médicos las solicitaron y las resoluciones de los auditores, entre otras medidas de prueba.