Buenos Aires es una de las tres ciudades finalistas para albergar los Juegos Olímpicos de la Juventud en 2018. A pesar de los elogios que volcaron los especialistas en el informe que hicieron de la ciudad, alertaron sobre la inflación, ya que las cifras del presupuesto presentado no se condicen con las mediciones privadas.
El Comité Olímpico Argentino indicó hace pocas horas que la ciudad de Buenos Aires es una de las finalistas en la carrera por la elección de la sede de los próximos Juegos Olímpicos de la Juventud 2018.
Este anuncio llegó de la mano de la postulación de las ciudades de Medellín y Glasgow como las otras probables sedes, pero entre los pro y los contra de cada una, aparece un detalle económico del país que no es menor.
El problema, según el COI, es que el presupuesto que propuso Buenos Aires está basado en una inflación anual estimada del 5,7% desde ahora y hasta el 2018, pero se destacaron los indicadores privadas que dan cifras mucho más altas.
Esta creciente inflación en Argentina fue mencionada hoy por el Comité Olímpico Internacional como un problema potencial de la candidatura de Buenos Aires para estos Juegos de la Juventud. Así lo dejaron en claro en las 39 páginas del informe elaborado por el “grupo de trabajo” que evaluó a las cinco candidatas iniciales y donde hay muchos elogios para la capital argentina que el 4 de julio definirá si es o no sede del evento deportivo. Sin embargo, la tasa de inflación es motivo de reparo por parte de los expertos.
En ese informe aclararon que “Buenos Aires propone un presupuesto equilibrado para el comité organizador de los Juegos Olímpicos de la juventud (YOCOG) de 104,69 millones de dólares basado en una inflación anual estimada del 5,7% desde ahora y hasta el 2018 y un tipo de cambio de 1 dólar = 4,50 pesos argentinos”. Lo que hicieron los expertos, fue notar que los datos de la candidatura no son exactos en Argentina.
“El ‘grupo de trabajo’ notó que, de acuerdo a indicadores económicos independientes, las tasas de inflación anual en la Argentina han sido en realidad mucho más altas (aproximadamente del 16 al 25%) en los años recientes, lo que podría presentar un riesgo que el YOCOG debería tomar en cuenta, agregaron.
Hoy la tasa de inflación es centro de una fuerte disputa política entre el Gobierno de Cristina Fernández, que en las cifras oficiales ronda el 10% y desde la oposición, los sindicatos y las organizaciones independientes, la sitúan entre el 25 y el 30 por ciento.
Cabe destacar que recientemente, el Fondo Monetario Internacional (FMI) apercibió al país por la relativa fiabilidad de las cifras del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).