El presidente y co-fundador de Prisioners Defenders habló desde España en la 99.9 explicando los alcances del pronunciamiento del Parlamento Europeo respecto de las prácticas de esclavitud en Cuba y particularmente de las misiones de médicos cubanos.
La decisión que tomó el Parlamento Europeo el pasado 10 de junio acerca de las misiones de médicos cubanos en el mundo puso el tema nuevamente en escena a nivel mundial.
En la 99.9, el presidente de y co-fundador de Prisioners Defenders, Dr. Javier Larrondo explicó los alcances del pronunciamiento condenando las violaciones de derechos humanos en Cuba: “la Unión Europea ha condenado las violaciones de derechos humanos en Cuba, pero dentro de ello especialmente la práctica de esclavitud moderna, las brigadas médicas cubanas en el exterior. Se alineó con informes de Naciones Unidas y el Estudio Universal de Cuba de 2018, con Human Right Watch y otros organismos que ratificaban este patrón de esclavitud”.
A partir de distintos testimonios de los propios protagonistas de la historia, se puede visibilizar lo que está sucediendo: “es un trato de esclavos muy tangible. No aplica sólo a los médicos, sino también a los deportistas, marinos y todos los titulados de nivel medio que salen al extranjero para trabajar en empresas del estado como músicos e intelectuales. Cuando el estado cubano interviene se quedan con el 80 u 85% del salario y les aplican la ley que pone penas de cárcel de 8 años para las personas que dejan el trabajo o cuando terminan no regresan a Cuba. Hay 35 mil médicos en todo el mundo pero el servicio a la medicina que es tan importante, se realiza bajo esclavitud y los países que los contratan están colaborando”.
Prisioners Defenders se encargó además de publicar un número estimado de dinero que el estado se queda a través de las personas que tiene trabajando en el exterior reteniéndole sus ingresos: “las misiones médicas están en torno a los 7 mil millones de dólares. El resto llega a sumar 8.500 millones de dólares, es decir el 55% de la balanza comercial de Cuba. Es decir que se nutre, en su mayoría por la explotación capitalista de trabajadores en estado esclavo. Es la antítesis de lo que un social-demócrata puede aspirar en la vida”.
Sin ir más lejos, Axel Kicillof fue uno de los que propuso para la provincia de Buenos Aires en pandemia traer delegaciones de médicos cubanos, algo que incluso se ha demostrado que derivó en la modificación de estadísticas: “de los 622 testimonios presentados, el 60% dijeron que les obligaban a alterar las estadísticas. Sacaban los nombres de pacientes falsos de la guía telefónica. Los médicos son las víctimas de esta historia, sus familias están retenidos en Cuba, sus pasaportes y títulos también; lo que son como persona no existe salvo que acaten las normas del gobierno cubano. Incluso hay muchos agentes de seguridad del estado que se hacen pasar por médicos para hacer espionaje en los países, son una minoría, son un 15% del contingente desplegado en el mundo”.