El abogado se manifestó acerca de las jubilaciones de privilegio, el diferencial que poseen y cómo se distribuyen. Además habló sobre la situación jubilatoria en general y el estado de la caja de ANSES actualmente. “El ANSES fue la billetera del Estado en los últimos años”, afirmó en Noticias & Protagonistas.
Juan Pablo Chiesa, abogado, dialogó con la FM 99.9 sobre las jubilaciones de privilegio, de las ordinarias y la utilización de la caja de ANSES por distintos gobiernos a lo largo del tiempo. “Las jubilaciones privilegio nacen con una ley otorgando asignaciones mensuales vitalicias a determinados funcionarios diplomáticos, de la corte, ex presidentes y vice presidentes. En el año 2002 fueron llevadas a cabo al poder legislativo para poder limitarlas, para poder controlarlas, situación que llevó a un riesgo político muy importante”, contó.
“Llevan montos bastante grandes, hasta $300 mil pesos mensuales, ellos están fuera de la jubilación ordinaria. El presidente Alberto Fernández pretende eliminarlas y que queden solamente algunas jubilaciones para ver qué tratamiento pueden darle. Los políticos actuales se matan por conseguir una renta vitalicia. Esto tiene un costo político, veremos qué pasa cuando lo tratan. Pero es una cuestión que hay que llevarla a cabo.”, añadió para describir la situación de las jubilaciones de privilegio actualmente.
Para cerrar dicho tema explicó que “hay 7 mil beneficiarios del poder judicial a nivel nacional y cerca de 700 diplomáticos con montos muy elevados. Si bien dicen que no mueve mucho el presupuesto, yo no estoy de acuerdo, ganan en un mes lo que gana un jubilado ordinario en un año”.
“El ANSES fue la billetera del Estado en los últimos años, necesitábamos plata y se recurría al ANSES, lo han vaciado. El gobierno actual está solicitando dinero al ANSES para hacerle frente a los vencimientos, los jubilados son valores de ajustes. Se ha metido mucha mano a la caja de ANSES por lo menos en los últimos 12 años”, aseguró en cuanto a las decisiones políticas de los últimos años.
Concluyó usando su experiencia en el tema de las jubilaciones para expresar: “En el mundo el promedio jubilatorio es de 65 años, el tema es la obligatoriedad o la voluntariedad que tiene una persona en hacerlo. Hay mucha gente que no quiere jubilarse aunque tenga la edad. Habría que cambiar todo el régimen provisional, es muy complicada la seguridad social, es un derecho universal integro que abarca al ser humano desde que nace hasta que muere pero nunca fue tratado con la seriedad y el respeto social que se merece”.