Cynthia Nixon ha sido una de las figuras más presentes en la carrera de Bill de Blasio hacia la alcaldía de Nueva York. “Hay semanas en las que veo a Cynthia hasta cuatro días seguidos en distintos actos. Está metida a fondo en esta campaña”, manifestó en mayo el alcalde electo.
Ahora que ha logrado imponerse en las urnas, De Blasio decidió incluir a la actriz de la popular serie de televisión “Sexo en Nueva York” en su equipo de transición. Se trata de un grupo de 40 personas que incluye al rabino Michael Miller, al director del centro islámico de la Universidad de Nueva York, Imam Khalid; al director de relaciones externas de Google, William Floyd; al fundador de la tienda on-line Guilt, Kevin Ryan; y al director del Museo de Brooklyn, Arnold L. Lehman, entre otros.
La inclusión de Cynthia Nixon generó rumores que la señalan como candidata ideal para ocupar el puesto de concejal de las Artes en la ciudad. La actriz se ha acercado a la política cada vez más en la última década, cuando sus hijos ingresaron en la escuela pública y como respuesta a los recortes.
En ese grupo de defensores de la enseñanza pública, estaba también Bill de Blasio. El apoyo que la actriz le ha brindado al nuevo alcalde ha sido muy importante. Para la campaña electoral, Nixon consiguió donaciones de colegas como Alec Baldwin o Sarah Jessica Parker. Y logró el apoyo de otros como Susan Sarandon, Marisa Tomei , Steve Buscemi, Chris Noth, Aida Turturro y Harry Belafonte.
Nixon se involucró en la campaña de De Blasio, asistió a actos y buscó el voto de la calle. También se involucró a fondo en la campaña de reelección de Obama. Nixon, hija de un periodista radiofónico y una actriz, graduada en el College de Barnard de la Universidad de Columbia, debutó en los escenarios de Broadway a los 18 años. Hasta el 2002, estuvo casada con el fotógrafo y profesor Dany Mozes, padre de sus dos hijos mayores. En 2004 empezó a salir con la activista Christine Marinoni, con quien se casó en mayo de 2012. Viven en Soho, compran en el supermercado Wholefoods y van a todas partes en transporte público, una vida alejada de las limusinas y la fama.
Nixon ha recorrido todo el país defendiendo el derecho al matrimonio homosexual y cuando hizo público su apoyo a De Blasio, muchos expresaron su sorpresa porque no se alineó en el frente de Christine Quinn, abiertamente homosexual y la primera mujer que optaba a la alcaldía. Al respecto, declaró: “creo que es un signo de progreso, como si se hubiera disipado el humo y así los gays, los negros, los caucásicos y todo el mundo puede ver más allá de la persona que es como ellos y fijarse más en lo que un candidato tiene planificado para la ciudad”.