En un comunicado oficial, la compañía brasileña confirmó que suspendió la construcción del proyecto Potasio Río Colorado. El motivo fue el actual contexto macroeconómico. La obra ya se encontraba paralizada desde diciembre.
La empresa brasileña Vale, que tiene una fuerte participación estatal y de fondos que vinculados a empresas públicas, confirmó que suspendió la construcción del proyecto Potasio Río Colorado. Según comunicaron, esto es así porque “en el actual contexto macroeconómico los fundamentos económicos del proyecto no están en línea con el compromiso de Vale con la disciplina en la inversión de su capital y con la creación de valor. En el caso de que se reinicie el emprendimiento, se les dará preferencia a los trabajadores actuales del proyecto”.
Además, agregaron que evaluarán el reinicio de las obras en caso de que el contexto cambie y que seguirán cumpliendo sus compromisos: “Vale continuará cumpliendo con los compromisos relativos a sus concesiones y seguirá buscando soluciones que mejoren los fundamentos económicos del proyecto, para en ese momento evaluar su reinicio”.
Cabe destacar que el proyecto Río Colorado era uno de los emprendimientos mineros más ambiciosos del país y tenía prevista una inversión de casi 6.000 millones de dólares, siendo parte importante de la agenda en el encuentro bilateral cancelado esta semana entre las presidentas Cristina Fernández y Dilma Rousseff.
El fallecimiento del presidente venezolano Hugo Chávez indujo a las jefas de Estado a postergar la cita que iba a realizarse en el Calafate. A priori, se sabía que eran escasas las chances de resolverse un conflicto entre la minera y el Gobierno argentino. La compañía Vale había demandado una “adecuación” del tipo de cambio y una reducción impositiva para hacer más “rentable” la explotación del yacimiento. Sin embargo, a inicios de la semana pasada, cuando desembarcó en Buenos Aires, el ministro de Desarrollo e Industria de Brasil supo que eran escasas las probabilidades de avanzar en la dirección que pretendía la compañía minera brasileña.
El Ministro abordó con sus pares de Buenos Aires múltiples temas bilaterales, pero al ser interrogado sobre la empresa Vale en Argentina declaró que “ahora la negociación será directamente entre la empresa y el Gobierno argentino”. Luego se supo que en esa cita los funcionarios argentinos comunicaron la negativa de Cristina a aceptar las demandas requeridas.
Los cálculos de Vale indicaban que de los 6.000 millones de dólares previstos originalmente, la obra minera podría demandar ahora casi el doble. La razón tiene que ver con un costo salarial y tributario que se incrementó en los últimos tiempos, sin que hubiera una disposición oficial a mejorar el tipo de cambio que rige para el ingreso de los dólares al país.
Los directivos recurrieron al gobernador de Mendoza, Francisco Pérez, para comunicarle sus problemas y la cita terminó en un punto muerto donde la empresa puso un plazo máximo para detener los trabajos de montaje de la mina el 28 de febrero último.
Ese mismo mes, una reunión entre los cancilleres Héctor Timerman y Antonio Patriota renovó las esperanzas de reactivación del proyecto: “nuestros embajadores y equipos designados por las presidentas Dilma Rousseff y Cristina Kirchner están trabajando denodadamente para que Vale continúe en Argentina y siga con las inversiones”, aseguró el ministro argentino en una rueda de prensa. Y agregó: “el proyecto todavía va dar grandes satisfacciones a ambas partes, al inversor y a la República Argentina”. Sin embargo, las obras siguen paralizadas y los proveedores aún no han recibido ninguna comunicación.