Esteban Wood analizó esta mañana en la 99.9 la banalización en el consumo de drogas que se ha intensificado en los últimos años. “Hay un impacto tremendo con un 75% de incremento en el consumo en los últimos cuatro años. Se explica por esta cantidad de mensajes en la cabeza de los chicos que les dicen que está bien fumar un porro”, puntualizó.
La palabra de Morgan Freeman ha llegado a todos los rincones del planeta. Una persona de alto reconocimiento mundial confesando su consumo habitual de marihuana, es una publicidad demasiado importante para una sustancia tan nociva. Esta mañana, el especialista Esteban Wood habló en la 99.9 sobre lo que se ha generado en los últimos años con la banalidad del consumo: “la marihuana no puede tener la publicidad y el marketing que tiene, por ejemplo, el cigarrillo o el alcohol. La buena prensa y la utilización de figuras estelares como Morgan Freeman buscan una banalización del consumo ante la imposibilidad de hacerlo por vías legales. Hoy ya nadie discute los daños y las consecuencias”.
A pesar de los constantes intentos de ver ciertas drogas con fines medicinales, los propios países que autorizan su venta legalmente no indican que se deba fumar: “fumarse un porro no tiene bondades terapéuticas. Uruguay es un país que hizo una campaña terrible contra el tabaco por el daño que produce el fumar, también indica que la marihuana se debe consumir por vía oral y no fumandola”, ejemplificó.
Hoy la aceptación del consumo como algo cotidiano es el peor enemigo para la propia sociedad y más aún cuando se baja el mensaje desde los ámbitos políticos: “somos una sociedad hipócrita. En el caso de la denuncia de Carrió respecto de Abal Medina, estamos hablando de políticos, sin embargo el alcohol y el tabaco también son drogas por lo que algunos legisladores podrían ir bebidos o fumando a las sesiones. La marihuana está en el camino de la aceptación social y nos tenemos que bancar que Victoria Donda haga campaña diciendo “vamos a portarnos mal, fumemos marihuana”, agregó Wood.
Toda esta exposición grotesca tiene consecuencias y aquellos que envían el mensaje deben hacerse cargo de lo que pueden producir: “se ha disparado el consumo de marihuana entre los adolescentes. Hay un impacto tremendo con un 75% de incremento en los últimos cuatro años y se explica por esta cantidad de mensajes en la cabeza de los chicos que les dicen que está bien fumar un porro. La clase política se debe plantear que tipo de mensajes está dando”, advirtió.
El problema de fumar marihuana o cualquier otra droga, trae aparejado consecuencias que no se circunscriben específicamente a la vida privada de las personas sino que puede afectar a quienes nos rodean: “cuando hablamos del uso de drogas y la privacidad o el derecho a consumir, no tenemos en cuenta el impacto a terceros. Todo consumo tiene riesgo para uno y para terceros”, concluyó.