“Tess” podría encontrar tanto pequeños exoplanetas rocosos, como enormes cuerpos celestes, y cubrirá un sector del espacio mucho más grande que el que cubre el “Keppler”.
Los expertos de la agencia espacial estadounidense NASA creen que al observatorio espacial “Kepler” le quedan pocos meses de vida. El satélite lleva nueve años en el espacio buscando planetas, pero llegó el momento de su jubilación. Pero para que la caza de exoplanetas, es decir, planetas fuera de nuestro Sistema Solar, pueda continuar, la NASA ya tiene preparado un sustituto: el Telecopio “Tess” (Transiting Exoplanet Survey Satellite), que será lanzado este lunes desde Cabo Cañaveral, Florida, a bordo de un cohete “Falcon 9”.
En los próximos dos años, la misión de esta máquina de 337 millones de dólares será escanear más de 200.000 estrellas brillantes más allá de nuestro sistema solar, en búsqueda de signos de planetas que circulen alrededor de estos astros. Como Kepler, el primer telescopio de su género lanzado en 2009 por la agencia espacial estadounidense, que será remplazado, TESS utiliza el método de tránsito, que puede detectar planetas cuando pasan frente a sus estrellas y disminuyen su iluminación de manera momentánea. Eso permite, entre otras cosas, deducir el tamaño, la masa y la órbita.
Según la Nasa, TESS podrá descubrir 20.000 exoplanetas -o planetas que están fuera del sistema solar- incluidos unos 50 del tamaño de la Tierra y más de 500 dos veces más grandes que nuestro planeta. “Podemos incluso encontrar planetas alrededor de estrellas que podemos ver a simple vista”, dijo el domingo a la prensa Elisa Quintana, científica del TESS, en el Goddard Spaceflight Center de la Nasa. En los próximos años “podremos salir a caminar y señalar una estrella y saber que tiene un planeta”, agregó.
La misión Kepler permitió descubrir 2.300 nuevos exoplanetas confirmados por otros telescopios. TESS, con sus cuatro cámaras avanzadas, escaneará un área que es 350 veces más grande. La etapa siguiente será para que los telescopios terrestres y espaciales observen más cerca los planetas así detectados. El telescopio James Webb Space Telescope, que sucederá al Hubble, está programado para lanzarse en 2020, y deberá ser capaz de revelar más sobre la masa de los planetas, la densidad y el aspecto de su atmósfera.
“TESS es un puente entre lo que hemos aprendido de los exoplanetas y hacia donde nos dirigimos en el futuro”, dijo Jeff Volosin, director del proyecto en el Goddard Spaceflight Center de la Nasa. Volosin dijo tener “la esperanza de que algún día en la siguientes décadas seremos capaces de identificar las condiciones potenciales de la existencia de vida fuera del sistema solar”, según el New York Times.