La sonda InSight de la NASA, que llegó al planeta rojo el 26 de noviembre último, usó una cámara en su brazo robótico para tomar su primer selfie en la superficie de Marte, un mosaico formado por 11 imágenes.
Este es el mismo proceso de imagen utilizado por la misión del rover Curiosity, en el que se toman muchas imágenes superpuestas y luego se unen. Visibles en la autofoto aparecen el panel solar del módulo de aterrizaje y toda su cubierta, incluidos sus instrumentos científicos.
Los miembros del equipo de la misión también han recibido su primer vistazo completo al “espacio de trabajo” de InSight: una media luna de terreno de aproximadamente 4 por 2 metros directamente enfrente de la nave espacial. Esta imagen es también un mosaico compuesto por 52 fotos individuales.
En las próximas semanas, los científicos e ingenieros pasarán por el minucioso proceso de decidir dónde se colocarán los instrumentos de la nave espacial en este espacio de trabajo.
Luego, ordenarán al brazo robótico de InSight que fije cuidadosamente el sismómetro SEIS (Seismic Experiment for Interior Structure) y la sonda de flujo de calor HP3 (Heat Flow and Physical Properties Package) en las ubicaciones elegidas. Ambos funcionan mejor en terrenos nivelados, y los ingenieros quieren evitar colocarlos en rocas de más de 1,3 centímetros.
“La casi ausencia de rocas, colinas y hoyos significa que será extremadamente seguro para nuestros instrumentos”, dijo el investigador principal de InSight, Bruce Banerdt, del Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA en Pasadena, California. “Esto podría parecer un terreno bastante simple si no estuviera en Marte, pero estamos contentos de ver eso”.
El equipo de aterrizaje de InSight eligió deliberadamente una región de aterrizaje en Elysium Planitia que está relativamente libre de rocas. Aun así, el lugar de aterrizaje resultó incluso mejor de lo que esperaban. La nave espacial se asienta en lo que parece ser un “hueco” casi libre de rocas, una depresión creada por un impacto de un meteorito que luego se llenó de arena. Eso debería facilitar que uno de los instrumentos de InSight, la sonda de flujo de calor, alcance su objetivo de 5 metros debajo de la superficie.