Las marcas baratas le sacaron “la corona” al mejor reloj de lujo del mundo

El mercado crece apuntalado por las mejoras en las prestaciones y las rebajas de precios, a raíz del incremento de la oferta.

Los relojes inteligentes se abren camino gracias a la mejora de las prestaciones y el incremento de la oferta existente. El año pasado se vendieron en todo el mundo 51 millones de unidades, un 54% más que en 2017, según datos de IDC. Una cifra, sin embargo, aún modesta, si se tiene en cuenta que se comercializaron 1.400 millones de smartphones.

La consultora ofrece un dato interesante: el volumen del mercado de relojes conectado, que ascendió a 18.800 millones en 2018 (un 18% más), se aproxima al que mueve la industria suiza de relojes tradicionales, que el año pasado creció un 6% hasta 21.400 millones de dólares.

El negocio sigue dominado por Apple, que controla la mitad del mercado. A pesar de que aumentó sus ventas un 27%, el año pasado perdió cuota de mercado.

Según Strategy Analytics, Apple alcanzó en 2018 un 50% de participación, diez puntos menos que en 2017.

“El Apple Watch cede terreno frente a Samsung y Fitbit, que han mejorado significativamente su catálogo y su presencia en tiendas el año pasado”, explica Neil Mawston, director de Strategy Analytics, de acuerdo a una publicación de Expansión.

Según estimaciones de los analistas recogidas por Visible Alpha, este negocio le reporta a Apple unos ingresos cercanos a los 10.000 millones de dólares, cifra que podría alcanzar los U$S 15.000 millones en dos años.

Ramón T. Llamas, director de investigación de IDC, explica que tras Apple hay una larga lista de compañías que lograron crecimientos de doble o triple dígito. “El resultado es una oferta creciente de dispositivos con una amplia gama de precios que cubren las demandas de los usuarios”, explica.

Precios más accesibles
La oferta de relojes con precios más asequibles atrae a nuevos consumidores. Fitbit, número tres del mercado con un 12% de cuota -aunque a mucha distancia de Apple-, acaba de lanzar una versión de su reloj Versa que parte de los 160 euros.

Apple, por su parte, redujo a los 300 euros el precio de su Series 3 tras lanzar en septiembre del año pasado su nueva familia de relojes.

Gartner prevé que el precio medio de venta se sitúe este año en el entorno de los 210 dólares (185 euros), un 5,5 % menos que en 2018.

Alan Antin, analista de esta consultora, explica que los mayores volúmenes de ventas se traducen en una reducción de los costes de los componentes y de fabricación. Y aunque marcas como Apple “intentan mantener estables los precios”, la entrada de jugadores más competitivos empuja a la baja el precio medio.

Asimismo, se espera que marcas tradicionales como Fossil y Casio ganen cuota al tener un mayor catálogo que los fabricantes de tecnología.

En este sentido, Gartner estima que las firmas de la industria tradicional relojera se quedarán con un 20% del mercado mundial en 2022.

Mientras, la oferta de más funcionalidades ligadas a la salud puede ser el arma que utilicen las marcas premium para diferenciarse de la competencia.

Apple exprime su condición de pionera
Apple no desvela la cifra de ventas del Apple Watch. Según Strategy Analytics, en el último trimestre, el más fuerte del año, comercializó 9,2 millones de relojes -IDC eleva la cifra a 10,4 millones- gracias a la buena recepción de su último modelo, que parte de los $ 21.100. La anterior serie está a la venta desde 300 euros.

Fitbit Versa, desde $ 7.800
La compañía, conocida sobre todo por sus pulseras de actividad, apuesta también por los relojes inteligentes. De vender apenas 500.000 unidades en 2017 pasó a comercializar 5,5 millones de dispositivos en 2018, según Strategy Analytics. La apuesta de la compañía es la familia Versa, que parte de los 160 euros.

Samsung duplica su cuota de mercado
La compañía logró en el último trimestre situarse segunda del ránking con un 13% de cuota (frente al 5% de un año antes), aunque en el conjunto de 2018 está en tercera posición cerca Fitbit.

Strategy Analytics apunta a la buena acogida del Galaxy Watch en Asia y Norteamérica. El nuevo Watch Active cuesta $ 12.253.

Garmin: gama alta desde $ 73.800
Garmin, que fue el tercer fabricante del ranking en 2017, cae ahora a la cuarta posición gracias al tirón de Fitbit. La compañía vendió algo más de 3 millones de unidades en 2018, lo que le otorga un 7% de cuota mundial.

Acaba de presentar su gama alta de relojes Marq, con precios desde $ 73.820 euros.