The New York Times publicó un artículo que destaca la “inesperada” influencia del Papa Francisco en el debate político estadounidense.
La nota publicada en The New York Times destaca cómo la palabra del Papa y su “fuerza moral” son cada vez más importantes en las citas de los legisladores demócratas y republicanos.
Desde el Vaticano, a más de 8.000 kilómetros de distancia, el papa Francisco, que ha cautivado al mundo con su mensaje de justicia económica y tolerancia, se ha transformado en una figura presente en el debate político de Washington, dicen algunos de los párrafos de la nota.
“Esta semana, en la que los legisladores vuelven a sus bancas y se cumplen 50 años de la ‘guerra contra la pobreza’ declarada por el presidente Lyndon Johnson, los demócratas -incluidos los católicos enfrentados con la jerarquía católica conservadora por cuestiones políticas- están aprovechando las palabras de Francisco como una rara oportunidad para apelar a la fuerza moral del papa e impulsar, así, una agenda de temas, como la extensión de los beneficios de desempleo y el aumento del salario mínimo”, destaca la nota.
Además, resalta la opinión de algunos senadores que reconocen la influencia del Papa. Por ejemplo, la del senador demócrata Richard Durbin, de Ilinois, quien dijo: “a muchos de los que estamos en la arena política, el Papa nos ha dado aliento y nos ha puesto un verdadero desafío: recordar y estar a la altura de muchos de los valores que nos llevaron a trabajar en la vida pública”.
“La denuncia del Papa sobre la economía de la exclusión da en el corazón del debate entre los dos partidos sobre el rol que debe desempeñar el gobierno. A los demócratas como Durbin y el presidente Barack Obama les gusta citar al Papa en sus discursos, para reforzar su punto de vista”, escribe The New York Times.
Las referencias de Francisco a la necesidad de impulsar una “economía de la exclusión” que tome en cuenta las necesidades de los más pobres, también han sido resaltadas en dicha publicación ya que ha causado algunas incomodidades en los republicanos. Sus representantes “se ven forzados a justificar su voto a favor del recorte de los bonos de alimentos y beneficios de desempleo casi como si debieran revertir la percepción de que son indiferentes ante la pobreza”.
Uno de los casos más sobresalientes es el del republicano por Wisconsin, Paul Ryan, un potencial candidato presidencial para 2016. Ryan elogió a Francisco por “insuflar nueva vida al combate contra la pobreza”. En la misma línea se ha manifestado Newt Gingrich, ex jefe de la bancada republicana en la Cámara baja y actual conductor del programa Crossfire , de la cadena CNN: “creo que todos los republicanos deben adherir al punto central de la crítica del Papa, que nadie quiere vivir en un planeta de multimillonarios y gente que no tiene para comer”.
The New York Times recuerda que Francisco difundió en noviembre una exhortación apostólica titulada Evangelii Gaudium (La alegría del evangelio) donde se refiere a las “teorías del derrame” y la “dictadura” del libre mercado que perpetúa las desigualdades. En un discurso sobre la desigualdad, Obama citó esa exhortación papal.
Sin embargo, no todas las palabras son signos de aprobación. El mismísimo Ryan, defensor del discurso papal contra la pobreza, aclaró que en lo que respecta a la defensa del libre mercado el Papa “es un tipo que viene de la Argentina, y en la Argentina nunca tuvieron capitalismo de verdad”.