Mientras cursa su último año de Ingeniería Nuclear en el Instituto Balseiro, Laura Cruz que se convertirá en la primera salteña en tener ese título, habló en la 99.9 sobre su historia: “cuando intentaba entrar al Balseiro no me creía capaz de estar ahí, pero es verdad que todo se logra con esfuerzo y dedicación”, indicó.
Las ganas de obtener algo, es la mayor fuerza que puede tener una persona para buscar sus objetivos. La joven salteña Laura Cruz, con 23 años, está en el último año de la carrera de Ingeniería Nuclear que cursa en el Instituto Balseiro y será la primera mujer de su provincia en obtener ese título.
En la 99.9, Cruz explicó como tomó la decisión de estudiar una carrera poco común para las mujeres en el país: “cuando estaba estudiando ingeniería química veía como se genera la electricidad a partir de la energía nuclear. me gustaban mucho las aplicaciones y se me había metido en la cabeza ser ingeniera nuclear. Ya sabía como era el camino para ingresar y pude hacerlo”.
No son muchas las mujeres que están estudiando en el Balseiro, pero sin dudas se ha incrementado el número en los últimos años: “en mi carrrera somos dos mujeres, pero hay otras ingenierías donde hay más. La proporción en el Balseiro entre hombres y mujeres es muy baja. Espero que con todas las entrevistas que hago más chicas se animen a dedicarse a las ciencias duras. Ese es mi mensaje. Cuando intentaba entrar al Balseiro no me creía capaz de estar ahí, pero es verdad que todo se logra con esfuerzo y dedicación. Estudié muchísimo para ingresar y lo hice”, remarcó.
El origen de Laura es de una familia trabajadora de Salta y sin embargo, eso no la privó de soñar con una especialidad que a ella le despertaba pasión: “mi padre es guardiacárcel y mi madre policía, están ambos jubilados. Tengo tres hermanos y todo lo que obtuvimos fue trabajando. Hice primaria y secundaria en un colegio semi-privado de Salta y luego fui a la Universidad Nacional de Salta para hacer ingeniería química. En la secundaria hacía los cursos de Daniel Córdoba de física al alcance de todos porque me costaba mucho aprender en mi colegio. La forma en que enseñaba él, me facilitaba las cosas. Me hizo ver que la física es algo lindo y se aplica a la vida cotidiana”.
Ya en el tramo final de su carrera, tiene en mente en que campo quiere aplicar sus conocimientos y por eso señaló que “lo que pretendo es estudiar el uso de la radiación para tratar a las personas con cáncer, no creo que lleguemos a una cura pero sí disminuir la metástasis para que no se propague por todo el cuerpo y aliviar el dolor de los pacientes”.