El ex Auditor General de la Nación habló en la 99.9 sobre el fallo que condenó a Julio De Vido y le prohíbe además ejercer cargos públicos por el resto de su vida: “la actitud de los familiares de las víctimas nos han dado una lección que tenemos que agradecer”.
El 10 de octubre quedará grabado como un día particular en las retinas de aquellos que siempre buscan que la justicia de una respuesta certera. La condena e inhabilitación de por vida para ocupar cargos públicos contra Julio De Vido ha traído un bálsamo a los familiares de las víctimas de Tragedia de Once.
El ex titular de la Auditoría General de la Nación, Leandro Despouy también se mostró satisfecho por como se han dado los hechos teniendo en cuenta que fue el encargado de denunciar el estado de los trenes y los negociados que se hacían en los años del kirchnerismo. A través de la 99.9 indicó que “el caso tiene ribetes interesantes y en algunos casos innovadores. Esto último me pareció original, se empezó a incorporar en la jurisprudencia al empresariado dentro del fenómeno de la corrupción. De Vido era un hombre intocable, aparecía ante la opinión pública y los sectores de poder como una persona a quien no le entraba ningún tipo de reproche político”.
A pesar de ello, le llegó su hora con una condena de 5 años y 8 meses en una de las múltiples causas que tiene en contra. “De Vido ha sido una persona que se implicó en cada una de las situaciones, no es que sobrevoló la cuestión. Además, ha sido muy vengativo. En los últimos tiempos, tanto él como su mujer que fue su síndica, tenían una promiscuidad absoluta”, remarcó.
Además, destacó que siempre trató de destratarlo e incluso lo hizo en sus últimas palabras antes de la condena: “en el debate de ayer cuando lo cerró, terminó haciendo una alusión personal y peyorativa pero me preocupan las cosas que hizo en el pasado como intentar destituirme en el Congreso. Fue De Vido quien estaba detrás de todo eso, se transformará en una especie de Maria Julia, será una figura emblemática de la corrupción del gobierno K”, sentenció.
Otra de las patas de la corrupción en los trenes son los hermanos Cirigliano sobre quien todavía no se ha profundizado: “los Cirigliano estaban muy vinculado económicamente a Jaime y a De Vido; ha sido una familia que recibió miles de millones de pesos y lo sacaron al exterior. Lo que recibieron en Argentina es realmente descomunal y la auditoría pudo trabajar en varias puntas donde aparecían los Cirigliano. No sólo en los subsidios, las terciarizaciones y tareas de mantenimiento a empresas propias; sino también en el transporte automotor de pasajeros donde tenían una posición dominante en muchas de las empresas más importantes recibiendo fondos y subsidios”.
Por último, destacó la tarea incesante de los familiares de las víctimas que han logrado un fallo ejemplar como antes lo habían hecho con Schiavi y Jaime: “la actitud de los familiares de las víctimas es ejemplar, han tenido sabiduría, inteligencia y entereza para no meterse en ningún negocio político. No se casó con nadie y nos dio un ejemplo muy bueno de que cuando se confía en la justicia pero se le exige, pueden obtenerse resultados de calidad. Nos han dado una lección que tenemos que agradecer”, concluyó.