El gobernador del estado, Andrew Cuomo, ha culpado del incremento de los contagios a “las violaciones de las directrices en las sinagogas ortodoxas”.
Tras el aumento de los contagios en algunas áreas de la ciudad de Nueva York y el anuncio de las autoridades del cierre de los negocios no esenciales y otras medidas restrictivas para frenar la expansión del coronavirus, una ola de protestas de la comunidad ultraortodoxa judía ha sacudido el barrio de Brooklyn.
El alcalde de la ciudad, Bill de Blasio ha anunciado este jueves el cierre de 61 escuelas públicas, que se suman a las 108 ya clausuradas para evitar una segunda ola del virus y a las restricciones sobre los negocios y las concentraciones religiosas que han entrado en vigor este jueves en nueve barrios de Brooklyn y Queens.
El objetivo es “rebobinar en estos nueve códigos postales y retroceder para enfrentarse a los problemas utilizando las herramientas que conocemos”, explicó De Blasio en rueda de prensa el pasado sábado. Estas zonas tienen tasas de contagio del 3 por ciento o superiores en los últimos siete días.
También ha informado a través de Twitter que continuarán “monitorizando el progreso de cada área y no nos detendremos”, mientras apelaba a la unidad para evitar la segunda ola de contagios en la ciudad.
Por su parte, más de 400 rabinos y otros líderes religiosos judíos publicaron el jueves una declaración para “apoyar las medidas de salvamento basadas en datos para prevenir la propagación del covid-19 en Nueva York”, en la que también han condenado los recientes actos y protestas violentas.
Mientras que el gobernador del estado, Andrew Cuomo, ha culpado del incremento de los contagios a “las violaciones de las directrices estatales sobre el distanciamiento social y el uso de mascarillas en las sinagogas ortodoxas por el aumento del número de casos en algunas comunidades”.
Grupos de personas, muchos sin llevar mascarilla y portando carteles apoyando la candidatura de Donald Trump y Mike Pence a las próximas elecciones presidenciales, se han lanzado desde el martes por la noche a las calles de las zonas afectadas para protestar contra estas nuevas medidas, incendiando objetos e incluso atacando a miembros de la prensa.
“Acabo de ser brutalmente agredido, golpeado en la cabeza y pateado por una multitud furiosa de cientos de miembros de la comunidad en la protesta de Boro Park, mientras me gritaban ‘Nazi’ y ‘Hitler'”, ha informado el periodista Jacob Kornbluh a través de Twitter. De Blasio ha condenado este jueves el “repugnante” incidente y lo ha calificado de “inaceptable” en una rueda de prensa en la que ha anunciado más restricciones.
Estados Unidos, primer país del mundo por número de contagios, suma 7.419.230 positivos y 209.450 muertes. Nueva York, epicentro del virus en el país durante la primera ola de contagios, acumula 243.323 casos y 23.874 muertes. Las últimas cifras oficiales suman casi dos mil casos y 10 muertes en 24 horas.